Días después de que la Sala B en lo Penal Económico confirmara el procesamiento de Franco Macri por presunto contrabando de automóviles y autopartes y revocara la falta de mérito dictada en favor de su hijo Mauricio, uno de los integrantes de ese tribunal, el Dr. Marcos Grabivker envió a esta redacción una carta cuyos términos completos reproducimos en la sección "Correo de lectores".
La medida judicial generó de manera inmediata la reacción de Franco y Mauricio Macri quienes dijeron que con esta investigación se atacaba al “grupo empresario nro 1 del país que más fuentes de trabajo genera en la República Argentina”, agregando que “cómo puede ser que haya delito si la Aduana autorizó todo el mecanismo de las operaciones” y que todas las medidas en su contra eran”fruto de un país trucho”.
Por otra parte, esta causa que comenzó siendo un desprendimiento de la causa “Renault” que tramita en la justicia federal de Córdoba, comparte en algunos sectores de la dirigencia empresaria, política y de la diplomacia francesa opiniones que este medio recogió oportunamente, siendo gran parte de ellas de público conocimiento.
Con respecto a estas manifestaciones, en la nota dirigida a diariojudicial.com el Dr. Marcos Grabivker destaca, que “esto sería realmente preocupante porque significaría que “el empresariado”, “la diplomacia francesa” y “sectores del gobierno” consideran que las medidas judiciales dictadas en los procesos penales son productos de “elecciones” de los magistrados o son una suerte de “opciones” similares a las medidas de tipo político que adoptan los poderes Legislativo y Ejecutivo - entre otras-. Las decisiones judiciales no son "medidas" que se pueden tomar o no. Son el resultado de las constancias del expediente y de la evaluación que, de acuerdo a las normas, debemos hacer los magistrados" entre otros conceptos.
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