Procesan y embargan a dos imputados en una causa por contaminación de la cuenca Matanza-Riachuelo | Casación ratificó condenas para policías que falsificaban procedimientos | La oficina que controla los arrestos domiciliarios en Santa Fe cerrará por falta de pago de salarios
Procesan a dos imputados en una causa por contaminación del Riachuelo
El titular del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal N° 2, Sebastián Ramos, resolvió el procesamiento de dos imputados en una causa por contaminación de la cuenca Matanza-Riachuelo. De esta forma se investiga el delito previsto en la Ley de Residuos Peligrosos, que reprime “a quien utilizando los residuos a que se refiere la presente ley, envenenare, adulterare o contaminare de un modo peligroso para la salud, el suelo, el agua, la atmósfera o el ambiente en general”. En este contexto, las actuaciones se iniciaron en 2008, al constituirse personal de la División Operaciones del Departamento Delitos Ambientales de la Policía Federal Argentina, por haber sido avistados envoltorios rojos, utilizados como contenedores de residuos patológicos. Allí se incautaron “desechos clínicos resultantes de atención médica, medicamentos y otros productos farmacéuticos”.
Confirman condenas para policías que fraguaban procedimientos
La Sala IV de la Cámara Federal de Casación Penal ratificó penas de hasta tres años en suspenso a un grupo de agentes de la Policía Bonaerense, por el delito de falsedad ideológica de documento público, al haberse comprobado que insertaron en actas declaraciones de testigos falsas o directamente inexistentes "concernientes a hechos que debían probar causando perjuicio". El Tribunal, compuesto por los jueces Mariano Borinsky, Juan Carlos Gemignani y Gustavo Hornos sostuvo que los condenados no "han podido dar ninguna explicación concisa y valedera de la forma en que obtuvieron las firmas de los distintos testigos de actuación en las actas que dieron inicio a los procedimientos cuestionados", siendo que no se logró probar la veracidad de las firmas de los testigos ni siquiera mediante pericias caligráficas