En Bolivia, la exigencia de carnet de vacunación o prueba PCR negativa de Covid-19 para acceder a lugares públicos o de concentración de personas está vigente desde el 1 de enero, como respuesta de urgencia a la explosión de una cuarta ola de contagios con el nuevo coronavirus. Contra esta medida, iglesias evangélicas y otros grupos vinculados a los sectores antivacunas pidieron hoy la nulidad de ambas medidas ante la Justicia. El abogado Gabriel Justiniano, representante de los demandantes, sostuvo que la exigencia de un carnet de vacunación constituiría en la práctica una forma de obligar a la inmunización, lo que consideró contrario a normas constitucionales que protegen el derecho ciudadano a decidir sobre cuestiones de la salud.