De ese modo, el acusado deberá ingresar a la prisión de Alcalá Meco (Madrid) ya que no prosperó su presentación con la cual pretendía que se dejara sin efecto la sentencia que lo condenó a tres meses de prisión.
La medida sorprendió al abogado del guardia ya que según había explicado a medios de prensa, contaba con el expreso apoyo del Defensor del Pueblo quien le había recomendado al Tribunal Constitucional que sólo se lo debía suspender.
Los hechos ocurrieron hace un año cuando el condenado realizaba su último día de servicio en el aeropuerto vasco de Fuenterrabía donde realizaba labores de seguridad las cuales interrumpió para ir a cenar, hecho que fue entendido como una grave falta la cual derivó en su arresto por el término de tres meses.