En cuanto al tratamiento de temas como las “leyes del perdón”, enfatizó que “no hay ninguna regla de los 9” que indique que sin la presencia de todos los jueces no se pueda decidir sobre algún caso, “porque con 5 o más” ya se puede resolver, “pero la demora existe porque hay algunos que creen que ya es cosa juzgada, y otros que no”, y porque el nuevo Código Procesal precisa que algunas causas deben volver a Casación, en tanto que sobre el “corralito financiero” expresó que sucede lo mismo, “unos piensan que es constitucional, y otros que no”.
En alusión al caso particular de la quita de concesión del Correo Argentino al grupo Macri, Petracchi afirmó no tener “la menor duda de que los casos de las privatizadas van a llegar hasta a la Corte”, y aclaró que no siente al respecto ninguna presión, porque tampoco se dejó influir cuando sí existieron realmente durante el gobierno de Carlos Menem, “con el tema de las jubilaciones”.
“De los 5 jueces que éramos quedábamos en ese momento 3, y pusieron 6 para completar los 9” recordó Petracchi, en alusión a la ampliación del máximo órgano judicial, hecho tras el cual decidió “encerrarse” en su despacho para “cumplir” con su función de ministro sin la influencia de otros jueces ni funcionarios del Poder Ejecutivo y Legislativo.
A solo diez minutos de recibir el llamado telefónico de Kirchner, confesó ante la prensa que “muchas veces” pasó por su cabeza la posibilidad de alejarse de la Corte, pero remarcó que decidió aislarse en su despacho y decidir ajustado a derecho a pesar de no coincidir con varias de las leyes que debió aplicar porque “ese es un tema del Congreso”.
Con respecto al también reciente nombramiento de Eugenio Zaffaroni como juez de la Corte, indicó que “no se puede pensar” que es parte de un aluvión kirchnerista, “porque fue un hombre independiente toda su vida y no va a cambiar ahora”. Al respecto, desestimó también en su caso la cercanía al Poder Ejecutivo, y aclaró que “no tiene nada que ver” que se haya manifestada en varias ocasiones como peronista, línea de pensamiento con la que simpatiza por el concepto de la “justicia social”, y hacia quien tiene una “simpatía ostensible”.
En cuanto a los rumores de que será presentada una candidata femenina para el máximo tribunal, el magistrado entendió como “indispensable que se nombre a una mujer en la Corte”, en tanto que si bien explicó que conoce por sus fallos a una de las posibles jueces, remarcó que los ministros “en la medida de lo posible no deben ser amigos ni deben tener un trato frecuente”, porque entiende en este punto que “después les es más problemático discutir sobre algún tema”.