En este sentido, el centro informó que las compañías y los trabajadores habían llegado a un acuerdo, tras denunciar a las empresas por exigir a los dependientes orientales trabajar hasta 11 horas diarias sin pago de tiempo extra, y en muchas ocasiones, recibiendo menos del sueldo mínimo.
Aunque no quisieron dar detalles de los acuerdos por la confidencialidad arribada, miembros del APALC que representa a los 13 trabajadores, dijeron que sus clientes estaban muy satisfechos con los resultados de la demanda y que esperaban que la compañía Bebe asegure de aquí en adelante que no se violarán los derechos de los trabajadores.
“Cuando los trabajadores se unen, pelean por sus derechos y empiezan a platicarle a los consumidores la forma y bajo las condiciones que fueron hechas la ropa que van a comprar, esto podría ser un paso importante para detener el abuso de las tiendas”, dijo Minah Park, abogada de APALC.