“Al margen de todas las ilegalidades que estamos denunciando, ninguna prueba independiente puede ser usada para acusar a Ibarra. Es imposible. incluso suponiendo que existió el coche-bomba y que los policías se llevaron la camioneta el 10 de julio, así y todo, no hay forma de relacionarlos con el atentado”, remarcó el defensor oficial Víctor Valle.Por tercer día consecutivo, la defensa de Ibarra emprendió contra el juez Juan José Galeano al recordar un reconocimiento fotográfico realizado en su momento por el preso clave del caso, Carlos Telleldín, en el que –aseguró- “se violaron todas las garantías constitucionales”, aunque en rigor el procedimiento fue anulado hace tiempo por la Cámara Federal.
También, Valle objetó la incorporación reciente al debate oral de un video aportado por Galeano, donde se ve al abogado Mariano Cúneo Libarona –por entonces defensor de Juan José Ribelli- conversando con un ex jefe de la SIDE, a quien le sugiere “cambiar” a Ibarra por otro oficial de la bonaerense, de apellido Alí.
Valle aseguró que Galeano destruyó casi todos los videos que tenían pero se cuidó de guardar los que podían servirle “como plan B”. El defensor aseguró que no quería defender a Cúneo Libarona, a quien calificó de “escandaloso” y “bastante chanta”, pero aseguró que el mediático abogado no quiso hacer “nada turbio”.
Fue el único tramo de la declaración donde el abogado no pudo apoyarse en la interpretación de elementos de prueba y testimonios y prefirió insistir en una apreciación personal. En los días previos, junto a dos colaboradores, se refirió una y otra vez a decenas de testimonios para intentar probar, en principio, que no existió la camioneta-bomba.
En otro tramo del extenso alegato, Valle la emprendió contra las querellas y la fiscalía, e indicó que las argumentaciones acusatorias carecen de entidad porque no lograron probar por una vía independiente –sin tener en cuenta la declaración de Telleldín- la incriminación a Ibarra y los otros policías.
“De ninguno de los elementos independientes aportados a la causa y sostenido como probatoria por los fiscales y las querellas se puede sostener una imputación a Ibarra, mi defendido”, sostuvo Valle.
Los dichos de Telleldín
También, Valle ocupó buena parte de la declaración de ayer para refutar los dichos de Telleldín en la cuestionada declaración del 5 de julio de 1996, que El Enano firmó tras confirmar que su familia había recibido la primera parte de los 400.000 dólares pagados con fondos de la SIDE.
Citando en varios tramos los dichos de Telleldín en aquella declaración, los defensores de Ibarra detectaron contradicciones que parecían evidentes y otras algo más sutiles, como las descripciones incompletas de personas que el doblador de autos decía conocer bien.
“Esto es descolgado”, repetían los defensores oficiales “en esa declaración metieron mano muchas personas sin una coordinación suficiente”. Después, repasaron los elementos que los mismos acusadores consideraron falsos en aquella declaración y se preguntaron “¿Nadie se preguntó acerca de la verosimilitud de la totalidad de los dichos de Telleldin?”.
“Se consumó una mentira a toda la sociedad que duró 9 años, dos años más que lo que dura la prisión preventiva de mi representado Ibarra”, remató Valle.