En el mismo se analiza cómo los poderes políticos de nuestro país han vulnerado la independencia de la Corte en las últimas cinco décadas y se exponen las razones por las que la reducción del número de jueces del Tribunal puede ser un instrumento adecuado para preservarla en el futuro.
Además se mencionan cuatro proyectos de ley que ya están en el Congreso y que proponen la derogación del artículo 1 de la ley 23.774 que estableció el número de nueve jueces de la Corte. “Puede ser que en este tiempo, desde que se terminó el trabajo, se haya presentado otro proyecto”, aclararon desde esa Asociación. El documento ya fue remitido a distintos legisladores de ambas Cámaras que tienen alguna injerencia en esta materia.
En diálogo con Diariojudicial.com, Roberto Saba, Director Ejecutivo de la ADC, aseguró que “la gente tiene mayor confianza en la nueva Corte, y esto tiene mucho que ver con el decreto 222 que autolimitó las facultades del Presidente para designar a los nuevos integrantes”. Para Saba, el decreto fue una mejora con respecto a lo anterior, “donde se designaron cinco jueces de la Corte en cinco minutos o se nombró al Dr. Maqueda en una semana”, dijo.
Sin embargo, Saba destacó que “si se confirman las versiones periodísticas, de que se van a concretar nuevas vacantes en la Corte, y el Presidente elige otros jueces para reemplazar a los actuales, esto no sería bueno para consolidar una imagen de independencia del máximo tribunal”. En la misma línea, el Director Ejecutivo de la ADC, sostuvo que “la sospecha de la gente que los juicios políticos tienen están motivados en hacer vacantes para designar otros jueces no es buena”.
La propuesta es reducir los miembros de la Corte a 5 o 7, aunque no es algo taxativo, aclararon. Para esto el gobierno debería aprovechar la oportunidad que tendría en sus manos si prosperan los juicios políticos anunciados y desistir de la posibilidad de nombrar reemplazantes en esos cargos. “Si el gobierno quiere ser consistente con la idea de la autolimitación, la reducción de los miembros de la Corte sería bien recibida por la ciudadanía”, concluyó Saba.
Al ser consultado por este medio, Daniel Sabsay, abogado constitucionalista y titular de FARN, opinó que el proyecto “es bueno” y recordó los perjuicios que produjo la ampliación de la Corte en la década del noventa. “Una Corte con 5 o 7 miembros no modificaría en nada el funcionamiento del tribunal, es más, lo agilizaría”, agregó Sabsay.
Cabe recordar que a fines de 2003, el gobierno salió a desmentir los rumores periodísticos que hablaban de un proyecto del Ejecutivo a los fines de reducir el número de miembros de la Corte Suprema. El jefe de Gabinete, Alberto Fernández, dijo en ese momento que “el proyecto de disminuir la composición del tribunal no es prioritario” ni tampoco está “en carpeta”.
Sin embargo, la idea contaba con bastante consenso entre los propios miembros de la Corte. De hecho, Carlos Fayt presentó en el Congreso, en ese momento, un proyecto para bajar a cinco ministros la composición del tribunal. La presentación de Fayt quedó a cargo del diputado Jorge Martínez Llanos. “La Corte no debe ser un almacén de ramos generales”, argumentó el magistrado cuando hizo pública su propuesta.