E) OPOSICION

A Alterini, está encarnada por Alberto Spota y Carlos Cichello. El primero ya presidió el Colegio Público y viene de una amplia y reconocida trayectoria en el Colegio de Abogados de la Ciudad de Buenos Aires, un reducto del liberalismo conservador pese a que Spota viene del radicalismo de boina blanca. Extraña alianza con Alberti, un hombre vinculado al Frepaso y que registró sus méritos profesionales en la Asociación de Abogados de la Ciudad de Buenos Aires, la antítesis del Colegio de Spota. Pero como en política sobra el pragmatismo y falta ideología -acorde con los tiempos que hizo famoso un ex presidente del que los dos candidatos suelen adjurar- Alberti va como presidente al Colegio y Spota a la Asamblea y son los más peligrosos adversarios para Alterini que se considera favorito. Tercero en discordia aparece Cichello, un hombre que se repite en sus slogans y hasta en sus actitudes llamativas para el proselitismo pero no cambia en sus propuestas. Cichello insiste con proveer a los abogados de obra social -no se entiende como esta comisión de Bacqué no lo logró pese a los cuantiosos fondos que manejó- y en tratar de mejorar la situación de los abogados de base, que “patean” todos los días los atestados juzgados. Al igual que Spota son los únicos que exhiben una militancia política clara. Cichello fue secretario del ex delegado personal de Juan Perón en la Argentina, el colorado Daniel Paladino. Un hecho curioso en estas elecciones, es la falta de presencia de los aparatos políticos en el proselitismo previo, como lo tuvo hace cuatro años el encumbramiento de Bacqué que llegó a la presidencia del Colegio por una conjunción de radicales y frepasistas antes que se formara la Alianza de Raúl Alfonsín y Carlos "Chacho" Alvarez.

hugo morales / dju