La reforma fue aprobada por mayoría: 355 votos a favor, uno en contra y seis abstenciones. Así, quienes violen sistemas de computación o quienes generan o trasmitan virus informáticos serán sancionados como también los que se introduzcan en sistemas del Estado e instituciones financieras.
Las penas que establece la reforma son de seis meses a dos años de cárcel y una multa de 100 a 300 días de salario mínimo.
"Al que diseñe, elabore, transmita o reproduzca programas, códigos, comandos o información, o al que planee, permita o autorice o contrate a otras personas para la realización de estas conductas, con la finalidad de obstaculizar, interferir, modificar, borrar, manipular, o causar daño al normal funcionamiento de sistemas o programas informáticos, o para sustraer datos o información de dicho sistema, programas o equipo de informática, sean del Estado o de las instituciones que integran el sistema financiero, se le impondrá de seis meses a dos años de prisión y de 100 a 300 días de multa". Así quedo reformado el artículo 211 bis 1.
Además de los hackers, la reforma también establece penas para las personas jurídicas. Estas recibirán una multa de 500 a 1000 días de salario mínimo y la suspensión de sus actividades hasta seis meses.