La resolución la tomó el juez de Instrucción Nº1 de Santander, José Hoya Coromina, a partir de los indicios reunidos en la causa. El magistrado afirmó que la prisión preventiva fue dictada por “la falta de arraigo, domicilio conocido y falta de integración en esta ciudad” del imputado.
La resolución no se encuentra firme y puede ser apelada por el detenido. El hombre (a quien se identificó con las iniciales R.C.V.) estará preso hasta tanto se lleve a cabo el juicio oral.
Los hechos ocurrieron el domingo pasado cuando el ahora imputado eludió un control de velocidad en el que un policía estuvo cerca de ser atropellado, según relató El Diario Montanes de España. Ahí comenzó la persecución cuando, ante otro control, el conductor aceleró la velocidad que llegó a alcanzar los 170 km/h.
La persecución terminó cuando el conductor chocó con la pared de un túnel peatonal al que ingresó de contramano. Anteriormente otros tres agentes de policía también estuvieron cerca de ser atropellados.
Al momento de fundar la caución procesal el magistrado recurrió a distintos indicadores de riesgo procesal entre los que se destacan "los indicios racionales de la comisión del delito que se imputa, la gravedad del mismo y la alarma social generada".