El Sistema de Identificación Automatizado (SIA) reemplazara a la tinta que se utiliza desde 1909. El nuevo sistema se aplicará en las 66 cárceles de España, y ya funcionaba a modo de prueba en dos prisiones de Madrid. La población carcelaria de España es de 55.000 presos, informó el sitio Terra.
Ahora los internos colocarán sus dedos en un lector informático que arrojara la identidad de la persona. Pero el sistema además contendrá otro tipo de información sobre los reclusos. Permitirá saber las características físicas del detenido y señas particulares (como cicatrices o tatuajes); antecedentes criminales; o si ya estuvo en otras cárceles.
Por otra parte, el nuevo mecanismo permitirá controlar el avance administrativo del recluso en prisión. Un ejemplo de eso son las salidas transitorias: el sistema generará datos sobre el tema y una alarma advertirá al personal penitenciario en el caso que el detenido no haya regreso en el momento que debía hacerlo.
Las huellas digitales de todos los presos de España ya fueron digitalizadas. Además, el sistema permite incorporar las fotos de los detenidos. Eso se hizo en el 60 por ciento de los casos. El costo del SIA fue de 1.2 millones de euros.
La Dirección General de Instituciones Penitenciarias señaló que el nuevo sistema será más rápido a la hora de identificar a los internos y permitirá almacenar mayor cantidad de datos de los reclusos.
También se prevé que el mecanismo otorgue más control sobre la identidad de los presos ya que muchos de ellos suelen usar distintos nombres.