Los talleres serán organizados por la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN) que está delineando su conformación y las fechas exactas en que se realizarán. La FARN junto con la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires y el Gobierno porteño, a través del Ministerio de Medio Ambiente, firmaron en septiembre de 2006 un convenio para llevar a cabo un plan de trabajo de tres años para elaborar el Código.
Serán 20 los talleres de las más diversas temáticas. Habrá ámbitos de discusión de Evaluación de Impacto Ambiental hasta Instrumentos Económicos y específicos de la materia judicial como el Acceso a la Justicia. “Un taller específico para magistrados, fiscales y asesores será asimismo realizado a efectos de trabajar sobre aspectos de especial preocupación para el Poder Judicial”, informó la FARN.
Los talleres están abiertos a cualquier organización no gubernamental o ciudadano que quiera participar. Quienes quieran hacerlo deben completar una planilla de inscripción que publica la FARN en su página web.
Desde que se firmó el convenio ya se planificó el proceso de elaboración de un anteproyecto de Código Ambiental. En diciembre de 2006 se presentó un informe preeliminar en base a otros códigos ambientales de ciudades como Bogota, Paris y Nueva York.
En 2007, se realizaron estudios comparados, se recopiló información y se elaboraron informes técnicos en los que trabajaron más de una decena de profesionales. Todo eso derivó en un informe preliminar final.
Para este año, luego de la realización de los talleres durante el primer semestre, la FARN anunció que sus equipos técnicos se abocarán a la realización del primer borrador del anteproyecto de Código Ambiental de la Ciudad de Buenos Aires que será presentado ante las autoridades.
La Constitución de la ciudad de Buenos Aires establece en su artículo 81 que la Legislatura, con el voto de mayoría absoluta de sus miembros, aprueba y modifica el Código Ambiental.
La Carta Magna porteña establece también en su artículo 26 que el ambiente es un patrimonio común y que “toda persona tiene derecho a gozar de un ambiente sano, así como el deber de preservarlo y defenderlo en provecho de las generaciones presentes y futuras”.