Balbín anticipó por otra parte que para la instrumentación de la reforma se utilizarán parte de los 540 millones de pesos que el anterior gobierno había destinado a la construcción de la Ciudad Judicial, proyecto que la actual gestión desestimó.
El funcionario salió al cruce de eventuales suspicacias que pueda generar, al término de la Feria Judicial, la decisión del gobierno de darle protagonismo a la Corte, como cabeza del Poder Judicial en la elaboración del proyecto que abarca una amplia gama de innovaciones en materia administrativa-presupuestaria, informática y de administracion de Justicia.
"Es una buena oportunidad para establecer las competencias de la Corte y las del Consejo de la Magistratura, ya que han habido diferencias de criterios con respecto a lo que es territorio de uno y otro cuerpo", aseveró Balbín.
"La Justicia no tiene una buena imagen frente a la opinión pública" por lo que se intentará cambiar el actual sistema por otro que "le de respuestas a la gente en forma rápida", sostuvo el funcionario.
Uno de los proyectos más ambiciosos de la Reforma es la informatización de todo el sistema judicial, reemplazando el actual sistema de notificación escrita.
Si bien Balbín reconoció que "es cierto que no existen recursos", pero estimó que " se puede llegar a realizar con el financiamiento externo o con la utilización de los 540 millones de pesos que el gobierno menemista había destinado a la construcción de la ciudad judicial y que el actual presidente dejó sin efecto".
El proyecto también estipula la sanción de una Ley Orgánica del Poder Judicial donde se analiza la creación de juzgados de acuerdo al proceso y no a la materia, como están divididos actualmente. En ese sentido, los borradores que maneja el Ministerio de Justicia apuntan a que los procesos más complejos y los más simples sean tratados por separado en juzgados especilizados.