Lo delató el MSN

En un caso propio de las consecuencias de la intromisión de la Internet en el ámbito laboral, la Sala VIII de la Cámara Nacional del Trabajo convalidó el despido de un empleado que fue descubierto “in fraganti” por su jefe cuando le pasaba precios de su empresa a otra de la competencia a través de una conversación de Messenger.

Así lo decidieron los jueces Luis Catardo y Gabriela Vázquez, que señalaron que “tal proceder del actor, implicó la violación del deber de fidelidad, en tanto afectó la lealtad y confianza mutua que deben primar en un contrato de trabajo”.

Además, los camaristas juzgaron “acertada la decisión rupturista comunicada por la empresa” en razón de que también entendieron que el empleado despedido violó el “deber de buena fe, propio de la relación laboral” y que el empleador estaba habilitado a considerar que esa conducta podría reiterarse.

“De la declaración del testigo O. surge que resultó testigo presencial del momento en que el actor fue echado de su lugar de trabajo por el Sr. B., y que la situación tenía relación con una conversación donde V. pasó un precio que estaba cotizando una persona de la empresa, a una empresa de la competencia, y que lo sabe porque se vio en una conversación de messenger”, dice el fallo.

En primera instancia, en autos caratulados “VIDAL Gustavo Sergio c/ MICROSTAR S.A. s/ Ley 14.546”, el juez a quo había hecho lugar a la acción por despido injustificado, por lo que la decisión de la cámara revoca la sentencia y disminuye el monto de las indemnizaciones y multas reclamadas por el trabajador.

En tanto que el tribunal tampoco hizo lugar al agravio referido al rechazó de la calidad de viajante de comercio del actor, ya que en el intercambio telegráfico previo al inicio de las actuaciones reclamó la regularización de su salario y fecha de ingreso, exigiendo se reconozcan las condiciones correspondientes a sus tareas de vendedor de jornada completa.

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