Entre sus propuestas, Vicchi promueve la creación de un juzgado penal de garantías, una fiscalía penal, una Cámara de Apelaciones, todos dedicados exclusivamente en el tráfico y consumo de drogas, y con competencia territorial en la Primera, Segunda, Tercera y Cuarta Circunscripción Judicial. Estos nuevos juzgados y fiscalías estarán avocados a “la investigación, represión y castigo” de quienes cometan delitos ligados al narcotráfico.
Además, el diputado promueve la adhesión a la Ley Nacional 23.737 de Estupefacientes y Narcotráfico, lo cual “puede traer una sobrecarga de trabajo insoportable a los Tribunales Penales de Mendoza que por otra parte carecen de la experiencia y especialidad en investigación y juzgamiento de este tipo de delitos”.
“La adhesión que se postula implica que la Provincia podrá abordar en forma lisa y llana un combate directo contra el narcotráfico y todo lo que signifique comercialización, distribución para el consumo de estupefacientes”, según los fundamentos del proyecto.
Otra de sus iniciativas es para la creación de una “Agencia Especial Antidrogas (AEA) con competencia en todo el territorio de la Provincia de Mendoza”, la cual estará bajo la órbita del Ministerio de Seguridad, y estará integrada por personal civil y policial, y estará comandada por un Director y Subdirector.
Según la propuesta, dicho organismo cumplirá funciones de “policía judicial” y estará a disposición de los “fiscales antidrogas”
Vicchi fundamentó la creación de este nuevo organismo en la “debilidad de los dispositivos de prevención y sanción”, el cual “es necesario mejorar”.
Por último, propuso establecer un instituto provincial de “Recuperación, Curación y Rehabilitación” de adictos a las drogas, quienes ingresen ya sea por propia voluntad, por órdenes médicas o por disposición de un juez.
De aprobarse el proyecto, “la Provincia le asignará partidas presupuestarias especiales para su funcionamiento que se encontrarán en el Presupuesto General del Ministerio de Salud o el que en el futuro lo reemplace con las mismas atribuciones”, según prevé en el texto.
Para Vicchi, la recuperación de un drogodependiente es vital, pues “seguirá siendo adicto mientras viva, es decir, que el individuo se rehabilitara para poder vivir sin consumir la droga y, de allí en adelante, éste será un adicto en remisión, no esta usando la droga, pero para mantenerse en ese estado de abstinencia o remisión no podrá bajar la guardia”.
Al respecto, según plasmó en el proyecto, Mendoza carece de institutos de este tipo y los tratamientos sólo “se han realizado por instituciones privadas que por razones inexplicables han cerrado sus puertas debido a que se les han suspendido los subsidio