C) ESPEJO

Diametralmente opuesta pareciera ser la actitud prescindente de Balbín –sin ningún parentesco con el ex caudillo radical- a la decisión de dos notorios funcionarios vinculados al Frepaso: el ex juez José Massoni y la dirigente referente de los Derechos Humanos, Diana Conti. El primero se negó renunciar a la polémica Oficina Anticorrupción – cuestionada en las cercanías de De la Rúa por el perfil altamente sesgado de su accionar que mas de una vez puso en riesgo su proclamada transparencia- al sostener que su designación fue efectuada por el presidente De la Rúa y no por Gil Lavedra. Veremos como se ve en los hechos este “aguante” del ex juez de los Tribunales Orales de la Capital, que supo estar vinculado funcionalmente al hoy jefe de la Ciudad, Aníbal Ibarra cuando éste último era su secretario, para quien fue su mentor político –Gil Lavedra- y lo llevó a ese cargo para que le abriera espacios (cargos) en los juzgados federales. Estrategia que el propio presidente se encargó de desbaratar como cuando lo mandó a su ex ministro a pedirle disculpas al cuestionado juez Carlos Liporaci, por haberlo prácticamente injuriado por radio Mitre. De ese baldón no pudo regresar el ex ministro. De todos modos, quienes conocen en la intimidad a Jorge De la Rúa, creen que por el remozado edificio de Sarmiento 329 se vienen vientos de cambio, por lo menos, hasta el nivel de direcciones generales aunque el hermano De la Rúa mantiene sus decisiones en estricto secreto. De la conducción de las cárceles también se fueron Patricia Bullrich ascendida a Trabajo y Juan Carlos López, un destacado profesional que accederá al cargo de Procurador General de la Ciudad por méritos propios y no por ser familiar cercano del Jefe de Gobierno Aníbal Ibarra.

hugo morales / dju