Una pareja mexicana logró recuperar la patria potestad de sus dos hijas declarando a través de una webcam a través de internet. Eran inimgrantes indocumentados en EEUU que habían sido deportados. Las dos niñas habían quedado en Estados Unidos porque las autoridades, erróneamente, pensaron que eran víctimas de abuso infantil.
Usando la cámara web de su computadora, una pareja de mexicanos ganó un juicio en Estados Unidos. Es que para declarar en la Corte de ese país, usaron el único medio que tenía disponible y que les resultaba más económico que el alquiler de una sala para videoconferencia. Habían viajado para trabajar, y mientras se encontraban ahí con sus hijas fueron deportados y además, perdieron la patria potestad. Esto los motivó a llevar adelante reclamar por la potestad de sus hijas.
Sin "papeles", Margarita Almaraz y Alfonso Mejía igual decidieron aventurarse e ir a buscar trabajo a Estados Unidos. Después de encontrar la estabilidad económica trabajando ahí, sus familiares llevaron a sus hijas de uno y seis años para que se establezcan con ellos en la ciudad de Filadelfia.
Cuando llegaron, la pareja las anotó en una escuela del condado de Chester, donde residían. En el establecimiento, los profesores, que manejaban muy poco el español y desconocían por completo las costumbres mexicanas, interpretaron que ciertas actitudes de las niñas se debían a que eran víctimas de abuso infantil. Por eso, una Corte estatal decidió quitarles a los padres la patria potestad.
En tanto, la pareja decidió iniciar acciones legales para que les devuelvan a sus hijas, pero en el proceso fueron deportados y las niñas se quedaron en el país, mientras ellos estaban en México. Por su parte, el juicio seguía su curso.
Cuando llegaron a México, un organismo gubernamental les brindó ayuda y asesoramiento, y de esta forma lograron contratar una abogada en Estados Unidos que se hiciera cargo del caso. Pero las autoridades judiciales estadounidenses requerían la presencia de los padres para declarar, y la embajada de ese país no quiso otorgarles el visado a la pareja.
Pero la Corte de Chester decidió que los padres podían comparecer a través de una videoconferencia. La noticia resultó ser buena y mala, ya que de esa forma no tenían que ir hasta Estados Unidos. Pero por otra parte, el alquiler de una sala para esa actividad estaba fuera de su alcance. Así que solicitaron al Poder Judicial estadounidense que les permita usar una cámara web para declarar y la petición fue aceptada.
Gracias a eso, la pareja mexicana ganó el primer juicio en la historia que se desarrolló a través de una cámara web. A pesar de eso, y si bien la patria potestad fue devuelta, los padres están luchando para que las niñas sean devueltas a México, ya que aún se encuentran en Estados Unidos.
Este caso podría sentar un precedente, ya que desde la Secretaría de Desarrollo Rural y Equidad de las Comunidades (Sederec) del gobierno mexicano informó que hay muchas familias que se encuentran en la misma situación.