Un hombre deberá pagarle 96 millones de dólares a una ex empleada por acosarla sexualmente. Según declaró la mujer, el hombre le mostró su miembro mientras ella estaba en su escritorio.
Ashley Alford tenía 20 años en septiembre de 2006. Fue entonces cuando, según declaró, su ex jefe “se acercó por detrás, se sacó su parte íntima de sus pantalones e intencionalmente procedió a pegarle con ella en su cabeza".
También consta en la denuncia que un mes después, el jefe “empujó a Alford sobre un sofá en un cuarto trasero, le levantó la blusa y la sometió sexualmente”.
Pocos meses después la mujer decidió abandonar el trabajo para, en 2008, iniciar las acciones legales.
Por eso, un Tribunal de Illinois, estado de la región central de Estados Unidos, fijó una indemnización de 96 millones de dólares para Alford que era empleada en una empresa de alquiler de muebles.
Según precisó el diario español ABC, la mujer denunció los hechos pero desde la empresa no se tomó ninguna medida para ayudarla, o bien, protegerla. Desde el medio, también afirmaron que el gerente general del local le decía lo “bonita” que era y “comentaba en voz alta el tamaño de sus pechos mientras la tocaba”.
David Ratner, abogado de Ashley Alford, aseguró que el monto otorgado por el Tribunal estadounidense es “la más alta” que se obtuvo hasta ahora en un proceso por acoso sexual.
En tanto, el juez aseveró que podría reducir a la mitad la cantidad de dinero fijada en la sentencia teniendo en consideración los límites que fija al respecto el estado.