Pese a los desmentidos y a las palabras de De
la Rua, se viene ejerciendo sobre un probable destino diplomático de Antonio Boggiano. En la cena de jueces en homenaje a Ricardo Bustos Fierro, se volvió a comentar que este
ministro de la Corte podría cambiar su discreto despacho del cuarto piso de Talcahuano 550 por el Palazzo Romano, mezcla de arte renancentista con clásico en la cercanías de la Santa
Sede. Sin embargo, quienes conocen a fondo a Boggiano no creen que pueda tomar una medida de tal naturaleza sino es aprobado
por el Opus Dei, órden de la que es influyente miembro. Pese a los rumores -también se extendieron a la nueva dirigencia radical-
el hermético juez le pidió a sus amigos que desmintieran tajantamente tales rumores, al parecer nacidos en quienes apuestan sus propias fichas personales a ocupar un asiento en
la mesa nonogonal de la Corte.
dju / dju
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