Suarez Mason fue imputado por doce casos de sustracción de menores, ocurridos durante la última dictadura militar en la denominada "Zona 1" en la que tenía jurisdicción el cuerpo que comandaba el ex general exonerado de las filas del Ejército.
La Zona 1 abarcaba la Capital Federal y parte del Gran Buenos Aires, por lo que el ex militar hizo expresa mención en su declaración indagatoria que no estaba comprendido el hospital Militar de Campo de Mayo.
En dicho lugar funcionó en su centro de Epidemiología una maternidad clandestina, donde eran atendidas las parturientas que, según los testimonios de enfermeras y médicos, eran separadas de sus criaturas recién nacidas, equipadas con costosos ajuares.
Suarez Mason compareció hoy ante el juez federal Adolfo Bagnasco, quien tiene a su cargo la investigación inciada a raiz de una presentación formulada por la asociación de Abuelas de Plaza de Mayo. En esta causa está procesados y cumplen arresto domiciliario los ex comandantes e integrantes de las juntas militares Jorge Rafael Videla y Eduardo Emilia Massera, así como también el ex presidente de facto Reynaldo Bignone y el último comandante en Jefe del Ejército, el general (RE) Cristino Nicolaides.
Los delitos que se les imputan son permanentes, ya que hasta el momento se desconoce el destino de los chicos nacidos en unidades militares o en centros clandestinos de detención que funcionaron durante la última dictadura.
Tras su declaración indagatoria, que culminó minutos antes de las 15.00 el tribunal analizó un recurso interpuesto por los defensores del ex militar, expulsado de las filas del ejército cuando abandonó el país para eludir los juicios contra los responsables de la represión ilegal.
El ex general ingresó al despacho de Bagnasco a las 9.40 y prestó declaración ante el juez, con la presencia de la secretaria Olga Chávez y el fiscal Eduardo Freiler.