Pinochet, protegido por una fuerte escolta, había sido trasladado a este aeropuerto. Media hora más tarde, el Boeing despegó hacia Chile.
Pinochet permaneció retenido en el Reino Unido cerca de 16 meses atendiendo una petición del juez español Baltasar Garzón, que quería procesar al general por los crímenes cometidos tras el golpe de Estado perpetrado contra el Gobierno legítimo de Salvador Allende, el 11 de septiembre de 1973.
Straw advirtió ayer a los cuatro países que han demandado la extradición, España, Bélgica, Francia y Suiza, sobre su intención de pronunciarse definitivamente esta misma mañana, comunicarles la decisión inmediatamente y, a continuación, remitir por escrito explicaciones detalladas al Parlamento.
El senador Pinochet salió de la jurisdicción del Reino Unido", dijo Straw en su intervención ante la Cámara de los Comunes en la que expuso sus razones para poner en libertad al ex dictador y denegar su extradición a España.
"Todas las decisiones que he tomado han sido sólo mías, no del Gobierno" británico, dijo Straw al explicar que actuó con los poderes "casi judiciales" que le confiere la legislación británica en casos de extradición.
El ministro hizo una breve exposición de los 16 meses que ha durado el “caso Pinochet” en los tribunales británicos, desde su detención en Londres en octubre de 1998 por un auto del juez español Baltasar Garzón, acusado por graves cargos de violación de los derechos humanos durante la dictadura en Chile (1973-1990).
El procesamiento del general Pinochet "aunque deseable, ya no es posible", destacó Straw, quien manifestó que en las actuales condiciones de salud del ex dictador "no sería justo" que fuese juzgado en ninguno de los países que pidieron su extradición por los cargos que se le imputan.
España, Bélgica, Francia y Suiza pidieron la extradición de Pinochet al Reino Unido, pero sólo la solicitud española llegó a los tribunales, porque tuvo prioridad sobre las otras tres.
De ahora en adelante, los dictadores que escapen a la justicia de un país "no pueden asumir que están a salvo en otras partes" del mundo, declaró el ministro. El ministro propuso a la Cámara una revisión de la ley de extradición.
Por su parte, el juez de la Audiencia Nacional española Baltasar Garzón recurrió la decisión del ministro del Interior británico.
Según informaron fuentes jurídicas, Garzón, nada más conocer la decisión de Straw, remitió un recurso de apelación por fax a la Fiscalía británica y por vía diplomática al Reino Unido a través de los Ministerios de Justicia e Interior. Al parecer, el recurso no tendrá mayor eficacia, desde el momento en que Pinochet ya se encuentra fuera de la jurisdicción británica. En nuestro país,el diputado Marcelo Stubrin, con un dejo de resignación reflexionaba "el derecho penal no solo está para detener personas, también debe servir para aclarar los hechos que la historia aclarar".
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