De acuerdo a fuentes judiciales, Alvarez –que no tiene fueros desde su polémica renuncia- solicitó la prescripción de la causa ante la jueza Ana María Bulacio de Rúa para evitar el juicio entablado por el ex funcionario con quien debería verse en una audiencia de conciliación.
En el hipotético caso de que prosperara el planteo del ex vicepresidente de la Nación, la causa se declararía prescripta y el juicio habría finalizado por falta de acción del querellante al tratarse de un delito de acción privada.
La estrategia de Álvarez fue ideada por sus asesores legales luego de su renuncia a la vicepresidencia, cuando perdió sus fueros y un fallo de la Cámara de Apelaciones en lo Criminal y Correccional Nacional dispuso que se celebrara la audiencia conciliatoria con “Coti” Nosiglia.
En octubre último, la sala V de esa Cámara, integrada por los camaristas Mariano González Palazzo y Mario Filosof, revocó la resolución de primera instancia de la jueza Bulacio, que había suspendido la audiencia entre ambos.
Ahora, tras la presentación de Chacho, la magistrada a cargo del juzgado en lo correccional número 13 deberá decidir si la causa está o no prescripta y luego resolver si convoca a los interesados a la audiencia.