De los jueces del Tribunal Oral. Acorde con
la importancia que se les genera por tener este caso, no quisieron saber nada con empleados usados, solo aceptaban “0 km” porque "ya estaban contaminados" con la instrucción de Galeano.
Tamaño repertorio no fue aceptado por los máximos jueces -hombres de pocas pulgas- y enseguida le hicieron saber que los recursos deben administrarse de la manera más austera y prolija
posible. Por lo tanto, o toman lo que se le ofrece o lo dejan, pero contratos nuevos no hay. Además, los únicos que no deben "contaminarse" en el sentido de instruir y juzgar deben ser los
jueces y no los empleados, por el contrario en un caso tan complejo, el conocimiento de la instrucción es una ayuda fundamental, fue el razonamiento más diplomático escuchado en
el cuarto piso de Talcahuano 550.
hugo morales / dju
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