Algunos de los hinchas identificados en esa “gestión” tienen prohibido concurrir a los estadios donde juegue Boca, debido a su participación en los violentos incidentes que se registraron durante un encuentro amistoso con Chacarita Juniors, el año pasado.
.José Novello, abogado de Daniel Benedeti (el simpatizante de Chacarita agredido por los hinchas de Boca), habría solicitado al juez de instrucción Sergio Torres, que tomara las medidas necesarias para impedir que los procesados viajaran al exterior.El magistrado, a quien también se le solicitó que llame a declarar al capitán del equipo Jorge Bermúdez, rechazó ese reclamo, elevó las actuaciones por estos hechos a la Cámara del Crimen y le recordó a los organismos de Seguridad que los procesados en la causa tienen que solicitar un permiso especial al juzgado si pretenden abandonar el país.
La Cámara, por sorteo, designó al juez Salvat para que determine si corresponde abrir una investigación en torno a la reunión que los barras bravas mantuvieron con los jugadores de Boca.
El abogado Novello fundamentó su pedido en informaciones del 11 de agosto último, donde algunos matutinos de esta Capital, se refirieron a que el día anterior, un grupo de “barras bravas” de Boca , interrumpieron la práctica de los jugadores para exigirles una “ayuda” para viajar a España para ver a Boca contra el Villarreal.
Los hinchas, entre los que según los diarios estaban Rafael Di Zeo y Armando Pereyra, también habrían pedido dinero para poder estar en Tokio, cuando Boca enfrente al Real Madrid por la Copa Intercontinental.
Di Zeo, Pereyra y otra decena de “barras bravas” xeneizes fueron procesados por el juez Torres, por el delito de lesiones en perjuicio de Benedeti durante un partido amistoso entre Boca y Chacarita el 3 de marzo de 1999.
Los procesados tienen prohibido hasta el 31 de diciembre del 2000, concurrir a estadios en los que las primeras divisiones de Boca o Chacarita disputen partidos de fútbol.