En caso de accederse al reclamo deberá ser la Corte Suprema de Chile quien resuelva la cuestión respecto de Pinochet y de otros jerarcas del régimen que asumió el 11 de septiembre de 1973, tras el derrocamiento del presidente constitucional Salvador Allende, de cuyo gobierno Prats era Comandante del Ejército.
La presentación fue efectuada hoy por Pamela Pereyra abogada de la querella, en representación de las tres hijas de Prats, Sofía, Ángeles y Cecilia quienes habían adelantado que pedirían la extradición como uno de los máximos responsables por el doble homicidio del que también fue víctima su madre Sofía Cuthbert, y de formar parte de una asociación ilícita que se instaló en la DINA, la policía secreta chilena que operó durante el régimen, y que fue el instrumento para la aplicación del denominado "Plan Cóndor", por el que se eliminaba a los opositores fuera del país.
El pedido también incluye al ex jefe de la DINA, Juan Manuel Contreras Sepúlveda, al general Raúl Iturriaga Neuman, a los brigadieres generales (r) Pedro Espinoza, José Zara, y a Mariana Callejas, mujer del testigo protegido estadounidense Michel Townley, quien intervino en el asesinato de Prats.
La abogada Pereyra, patrocinante de la familia Prats dijo a los periodistas que la DINA "actuó en la planificación y operatividad del crimen" y fundó su pedido en el tratado de extradición firmado por Argentina y Chile y en el Código de Procedimientos Penal Argentino.
En la audiencia de hoy del juicio que se sigue contra Enrique Lautaro Arancibia Clavel, acusado por su participación en el doble crimen, estuvo presente la escritora e hija del asesinado presidente chileno, Isabel Allende, quien debió retirarse de la sala de audiencias debido a que podría ser citada a declarar como testigo.