Cavallo -quien interrumpió sus vacaciones y llegó a media mañana a los tribunales federales de Comdoro Py en un taxi- convocó a su despacho al secretario del juzgado de Liporaci, Marcelo Souvico, para interiorizarse del expediente, donde se suspendió la indagatoria del ex jefe de la Secretaría de Inteligencia del Estado Fernando De Satibañes, prevista para el próximo 27 de febrero.
La semana pasada su colega Rodolfo Canicoba Corral suspendió la indagatoria del ex ministro de Trabajo Alberto Flamarique y la ampliación de la declaración testimonial del periodista Joaquín Morales Solá, previendo que a su regreso Cavallo iba a necesitar de ese tiempo para conocer el expediente.
Cavallo admitió que estabá "contento y agradecido" por el respaldo que la Cámara Federal le brindó al designarlo al frente del juzgado federal 3, mientras dure la suspensión por 60 días de su titular Liporaci, quien según aseguró su abogado Hector Rodríguez enfrentará el Jury de Enjuiciamiento en su contra, sin presentar la renuncia al cargo.
El juez que investiga a Liporaci por presunto enriquecimiento ilícito aclaró, durante su breve encuentro con la prensa, que su designación no iba "en desmedro de otra gente" y estimó que en la elección primó la vinculación que tendría la causa del Senado con otra causa iniciada en su juzgado por la senadora neuquina Silvia Sapag, quien denunció al senador justicialista Emilio Cantarero por una maniobra similar.
Hasta hoy la Sala Primera de la Cámara Federal no había recibido el expediente, luego de la apelación de los fiscales a la falta de mérito dictada por Liporaci.
Cavallo se encerró en su despacho para interiorizarse del curso de la causa y para ello convocó a Sonvico y se aguardaba que de un momento a otro lo hiciera también con los fiscales Eduardo Freiler y Federico Delgado.
"Voy a ver que hago. No tengo ni idea, ¿qué voy a decir de una causa que no conozco?", advirtió al ingresar cuando fue abordado por decenas de periodistas que aguardaban sus primeras declaraciones. Sin embargo, y en relación con la otra causa por la que investiga el presunto enriquecimiento ilícito de Liporaci, reveló que estaba aguardando el informe de los peritos contadores a quienes se les encomendó se expresaran sobre la "evolución patrimonial" del magistrado suspendido. En esa causa, la instrucción la lleva el fiscal.
"No es mi causa, me esta hablando de una causa que no conozco. La voy a leer toda, me voy a reunir con la gente que trabajó y con los fiscales; después veré", aclaró una y otra vez Cavallo, quien este fin de semana supo que su imagen en alza también tiene respaldos en el Congreso. En ese sentido, dijo que estaba "contento ya que es un respaldo para mi, estoy agradecido de la Cámara que además es mi superior, pero no en desmedro de otra gente".
"Supongo -evaluó-que la cámara habrá tenido en cuenta las causas que he tenido o que pude haber tenido, y que pueden llegar a tener alguna relación con esta causa tan conocida de los senadores".
Cavallo no quiso defraudar la expectativa y aclaró por último que había adelantado el final de sus vacaciones previsto para el 7 de marzo "por la gravedad institucional que tiene" la causa del Senado.
En horas de la tarde y tras ratificar su "confianza" en el secretario Sonvico, Cavallo dictó las primeras "medidas de prueba" cuyo contenido no quiso revelar; se entrevistó con funcionarios de la oficina Anticorrupción y resolvió suspender todas las indagatorias y testimoniales que habían sido previstas para el mes de febrero.
"La causa es muy compleja", admitió Cavallo quien reiteró que a partir de ahora se va a abocar a "leer los veinte cuerpos del expediente" para tener un "panorama mucho mas amplio".
Cavallo admitió que le piensa imprimir su propio perfil a la causa y también a las indagatorias, al justificar su suspensión. "No quiero que me vengan con un cuentito" sin tener pruebas para profundizar en el interrogatorio, advirtió.
Por otra parte, y en declaraciones posteriores en su despacho, el magistrado aseguró que "toda la prueba que no se hizo se va a producir".
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