Alderete está acusado de haber "omitido promover la denuncia penal" que le habían sugerido los auditores del PAMI, Ricardo Reto y Oscar Colombo", quienes dejaron constancia en un expediente interno referido a las presuntas irregularidades que se habrían cometido en la organización de las "Primeras Jornadas de Capacitación para los Consejeros Auditores" llevadas a cabo en Mar del Plata los días 17,18 y 19 de diciembre de 1994.
En la denuncia, de la cual tomó parte la Oficina Anticorrupción, se le imputa, en su carácter de funcionario público, "haber tomado conocimiento de la existencia de diversos hecho ilícitos que involucraban a empleados y/o funcionarios del instituto a su cargo sin formular la correspondiente denuncia penal", obligación contemplada en el artículo 177, inciso 1 del Código Procesal Penal.
Además, se le imputó haber ocultado el expediente interno en una vivienda de Morón, cuando una vez asumidas las nuevas autoridades del PAMI retiró de su despacho más de 90 cajas con papeles, entre los que se encontraba esa documentación.
Ballestero sostuvo al dictar el procesamiento del ex funcionario que esos hechos se encuentran "acreditados y que "el expediente de mención apareció casi dos años después en una finca que fuera alquilada por el nombrado a fin de depositar sus efectos personales", por lo que Alderete "nunca formuló denuncia penal alguna".
"En mi opinión -reseñó Ballestero- Alderete debió formular (pues se encontraba obligado a ello) la correspondiente denuncia penal de los hechos contenidos en el expediente administrativo, los cuales llegaron a su conocimiento en razón de que las reparticiones jurídicas del Instituto le sugirieron la realización de denuncia penal ante la posibilidad de que se hubieran perfeccionado hechos delictivos en el ámbito del organismo".
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