Las denunciantes consideraron como "una alta traición" por parte de De la Rúa al “desalentar a los argentinos respecto del propio país, sembrando la incertidumbre, la inseguridad y la sensación de no pertenencia, al cerrar fuentes de trabajo, al no garantizar el acceso a la educación, a la cultura y a la Salud".
"Alta traición porque al ser elegido presidente, se depositó en él la esperanza de un cambio de rumbo en la política que venía devastando al país. En este año de gestión (De la Rúa) no sólo evidenció ser un continuador de la política menemista (contra la que simbólicamente se votó) sino que aparece como un instrumento aún más despiadado para su aplicación. La distancia abismal que separa su accionar del discurso que lo llevó a la presidencia no puede pasarse por alto".
En una presentación efectuada ante la Comisión de Juicio Político de la Cámara de Diputados, las denunciantes Mabel Belotto, Mariana Soledad Tkatch y Graciela Cristina Chein, sostuvieron que "la desviación del programa presentado se agrava al ser incorporado como ministro de Economía Cavallo, cuyas propuestas fueron rechazadas por la ciudadanía que, en las elecciones antes citadas, se manifestó en su contra al otorgarle un escaso 10 por ciento de los votos".
"Además -indicaron- no se puede olvidar la gestión cumplida por el mismo en el desempeño de la función pública, ya que es el responsable de la estatización de la deuda privada, la enajenación a precio vil del patrimonio nacional y del incremento de la deuda externa al doble, y está acusado de numerosos delitos, que no enfrenta ante la justicia amparándose en sus fueros de diputado nacional".
"Es inadmisible -señala el texto de la presentación distribuida hoy en el Palacio de Justicia- que se traicione tan abiertamente la voluntad popular, confirmando la sospecha de que en este país la democracia no funciona ya ni siquiera en la fachada del voto".