Esta nueva acción judicial presentada por los padres del chico que habría sido violado por otro alumno, se dirige contra el propietario del centro educativo Unión de Padres con Hijos Atípicos (UPHA), Carlos Santorín, y su directora, Susana Julia Elena Anselmi.
Los hechos que motivaron la denuncia ocurrieron el 12 de agosto de 1997 en el interior de la escuela situada en la calle Primera Junta 68 de la localidad de Quilmes, momento en el que la víctima tenía 15 años.
Según se relata en el escrito presentado ante la Justicia, los padres llegaron ese dia a buscar a su hijo y lo encontraron con la directora del establecimiento, quien no manifestó lo ocurrido, pero una vez en su casa, el chico hizo referencia a lo que había padecido.
Tras las evasivas que dieron como respuesta los directivos de la escuela ante los hechos, la familia concurrió a la seccional policial donde los médicos detectaron la presencia de semen entre la ropa del joven.
En la causa penal que aún se tramita en el Juzgado de Transición Criminal y Correccional número 7 de Quilmes, se estableció que los restos de semen hallados en la ropa del chico se correspondían en un 99,99 por ciento con las muestras extraídas a otro alumno con Síndrome de Down que compartía los recreos con el damnificado.
La demanda civil por daños y perjuicios persigue el resarcimiento de los "padecimientos físicos, psíquicos y psicológicos derivados del hecho", según indicaron los padres de la víctima.
Mientras que el menor que habría cometido el acceso carnal -que aún no ha sido acreditado- es inimputable penalmente en orden a su discapacidad y edad, la responsabilidad civil del ilícito podría recaer sobre los responsables del colegio. Durante la investigación se determinó además que habría existido otro hecho de similares características en la misma escuela, años atrás.