¡¡¡Atrás!!!

En una nota de fondo publicada hace mas de un año decíamos, a propósito de la necesidad de informatizar los distintos fueros que componen la Justicia Nacional, que “mientras la aguja para coser expedientes, como todavía ocurre en ciertos fueros, sea parte integrante de las herramientas con las que debe contar un juzgado, los abogados y los funcionarios judiciales seguiremos perdiendo tiempo y esfuerzo.”

Hoy se nos ocurrió hacer un pequeño relevamiento. Diariojudicial.com fue a las mesas de entradas ubicadas en la planta baja del edificio de Diagonal 1211, en esta Capital, donde funcionan buena parte de los juzgados comerciales. El panorama era tan deprimente como siempre, pero quisimos documentarlo gráficamente:

Estas imágenes corresponden a las distintas filas de letrados, pugnando por acercarse a las diversas mesas de entradas. Fueron tomadas hoy lunes a las 10,30 hs. Como puede verse, es tal la aglomeración de gente que en algunos lugares no se distinguen las distintas filas.

Lo peor del caso, como lo sabe cualquier persona que “haga tribunales”, es que esta situación pasa todos los días. Intencionalmente evitamos concurrir un “día de nota”.

En el mismo lugar donde sacamos las fotos están ubicadas las terminales para consulta de expedientes on line. El único problema es que no funcionan. Si funcionaran, solo podrían consultarse los expedientes de 16 de los 26 juzgados del fuero, porque los otros 10 no están en la red.

Debe hacerse una salvedad: Mientras que esta situación se reflejaba en la planta baja, en el primer piso del edificio de Diagonal 1211, nos encontramos con un juzgado como el comercial nº 4, que en sus secretarias 7 y 8 tenían las mesas de entradas sin colas o con una o dos personas en la fila, situación que se da también en otros juzgados del fuero. ¿Por qué esta diferencia entre juzgados que, se supone, llevan la misma cantidad de causas?.

La situación contrasta notablemente con lo que ocurre en el fuero civil, donde todos los juzgados y las Salas de la Cámara pueden consultarse vía Internet o en las terminales de autoconsulta. Precisamente, este era el panorama, a las 10,40 hs de hoy, en las terminales ubicadas en Lavalle 1220:

Si bien la informatización del fuero civil no es una panacea ni algo parecido a la perfección, la diferencia con su similar del fuero comercial es abismal. Parece que, mas que dos fueros distintos, estuviéramos hablando del poder judicial de dos países distintos.

Por otra parte, en marzo de este año, la Comisión de Administración y Financiera del Consejo de la Magistratura que preside el camarista civil Claudio Kiper, puso en marcha un proyecto de informatización para el poder Judicial de la Nación. La iniciativa está a cargo de una Subcomisión del cuerpo integrada por el magistrado Javier Fernández Moores, la Dra. Cristina Akmentis, el Ingeniero Carlos Tate y el Licenciado Gabriel Mehlman. El proyecto incluye un sistema informático con apoyatura sobre Internet que se aplicará en el Consejo de la Magistratura, la Corte Suprema de Justicia y todos los fueros del Poder Judicial. También se podrán gestionar causas y los fueros estarían interconectados entre sí.

Mientras tanto, los letrados siguen haciendo colas, esperando hasta cuarenta minutos para que le digan que el expediente “no está en letra”.

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dr. jorge oscar rossi / dju