Todos los que transitan por los distintos tribunales del país, sean nacionales
o provinciales, pueden dar cuenta de sus falencias: Juzgados atiborrados de
expedientes, juicios eternos, mala atención a las partes y a los letrados, exceso
de burocracia y ritualismo, etc. Con la idea de investigar distintas propuestas
para solucionar este problema, e iniciar un debate con la participación de nuestros
lectores, Diariojudicial.com dialogó con miembros de FORES.
FORES (Foro de estudios sobre la administración de justicia), es un centro de
estudios que no se limita a la investigación teórica, sino que busca crear en
todo el país un movimiento de opinión en torno al problema de la Justicia y
su solución.
Su Director Académico, el Dr. Héctor Chayer nos presentó el resultado de alguna
de las investigaciones que allí se llevan a cabo.
Así, hoy comenzamos con el primero de una serie de informes sobre la situación
de la Justicia en nuestro país. Empezamos analizando un concepto que quizás
parezca demasiado teórico pero que tiene indudable aplicación en la práctica
de la dura tarea de administrar justicia, tal como veremos mas adelante. Nos
referimos al concepto de "Oficina Judicial".
Dejemos que sea el Dr. Chayer quien nos lo explique:
HCH: Por oficina judicial entendemos una unidad mínima de producción
judicial que aporta la estructura técnica y humana necesaria para la tramitación
de los procesos. Por ejemplo una fiscalía, un juzgado de Instrucción , una Corte,
etc.
Las oficinas judiciales argentinas se vienen replicando en su estructura y mantenimiento
desde la creación del poder judicial mismo. Por ejemplo se crea un juzgado en
la Ciudad de Rosario y otro con la misma competencia en una ciudad mucho mas
pequeña y tiene la misma cantidad de empleados. Por otro lado estas estructuras
no están en absoluto diseñadas para el trabajo que van a realizar ni para la
carga de trabajo que van a recibir. Así tenemos estructuras sobre y subdimensionadas.
La cultura de trabajo de estas unidades judiciales tiende al ritualismo y al
formalismo, por ejemplo, dejando exclusivamente a la parte, en el ámbito civil,
el impulso del proceso, en vez de utilizar un sano activismo judicial.
Nosotros planteamos un cambio organizacional en la justicia. En primer lugar,
hacer una separación funcional en dos tipos de justicia. La justicia que aborda
los casos simples, que debe ser de respuesta inmediata y la que aborda los casos
complejos, cuyo tramite se adapta mas al proceso y forma de trabajo actual.
No es una separación por el monto de la causa sino por la complejidad de la
misma. Una ejecución hipotecaria, no importa el monto, tiene una tramitación
simple por parte del juzgado. En función de los valores que haya que privilegiar
en cada tipo de proceso habrá distintos modelos de oficinas judiciales.
Dju: ¿Cuáles serían esos modelos?
HCH: Podemos hablar de cuatro modelos de Oficinas Judiciales:
Oficina reducida: Aquí se privilegia la inmediación e intervención directa
del juez. es un modelo apropiado para los juzgados o fiscalías de instrucción
y para los juzgados que lleven adelante procesos de conocimiento. Hay pocos
empleados. Hablamos de inmediación porque no hay muchos empleados entre los
justiciables y el juez. el juez tiene un gran contacto con las partes.
Oficina reducida con equipo: Aquí también se privilegia la inmediación,
pero además se brinda soporte interdisciplinario, como sería el caso de lo que
necesitan los juzgados de menores, de familia y de concursos. Son pocos empleados
pero tenemos un equipo de apoyo compuesto, por ejemplo, por contadores o asistentes
sociales.
Gran oficina: Donde se privilegia la celeridad y la tramitación masiva
de expedientes y hay poca actividad jurisdiccional, como es el caso de los juzgados
de ejecución civil, comercial o penal.
Tengamos en cuenta que los juicios ejecutivos constituyen dos tercios de la
carga de trabajo del fuero comercial de la Nación, pero la actividad del juez
es escasa. Un juez no llega a firmar mas de tres veces en un juicio ejecutivo
pero lo que si existe es un gran volumen de trabajo. Acá se necesitan muchos
empleados, porque se necesita mucho trabajo administrativo y de tramite de atención
al publico y poca intervención del juez.
Oficina de gestión común: Funcionan dando apoyo a la actividad decisoria
del juez. los ejemplos son los juzgados de garantías, las cámaras de apelaciones
o la Corte. Las llamamos oficinas de gestión común porque brindan servicios
comunes a varias unidades judiciales. Por ejemplo, en una Cámara de Apelaciones
hay todo un tramite del expediente que es previo a que entre a voto de los jueces
y que puede hacerse en una oficina única de tramites en vez de que cada Sala
tenga su mesa de entradas.
Es decir, se trata de saber para que va a estar dedicada una oficina judicial
determinada y adecuar su estructura a ese propósito, como se hace en cualquier
organización.
Estos diferentes modelos de oficinas judiciales se encuentran detallados en
el Plan Nacional de Reforma Judicial, presentado por FORES en 1998, que fue
realizado por encargo del Ministerio de Justicia de la Nación.
Por supuesto, todo esto debe ir acompañado por un cambio en la cultura del trabajo
de tribunales, que pasa por la capacitación del personal, una disminución del
ritualismo, un mayor contacto con los justiciables y un uso adecuado de las
herramientas tecnológicas, cosa esta ultima que hoy no se hace ni en los juzgados
que están bien provistos de software y hardware.
Oficinas Judiciales: Algunos ejemplos
A continuación, FORES nos muestra, a titulo de ejemplos de buena o mala gestión
de una oficina judicial, los siguientes casos:
Caso 1: Juzgado Civil y Comercial Nº 1 de la ciudad de Pergamino
Su titular es el Dr. Ariel Pelayo Labrada. Este juez, en cuyo juzgado se tramitan
unas 1600 causas anuales, tomó una serie de medidas, sin aumentar personal
ni presupuesto ni, por supuesto, modificar ley alguna.
Por ejemplo, para estimular el cumplimiento de los estándares de duración de
un proceso, en la carátula de cada expediente, se pone la fecha de inicio del
expediente, el responsable de llevar la causa en el juzgado, el tiempo real
de tramite y el tiempo estándar, es decir el tiempo estimado de duración del
proceso. Los resultados fueron sorprendentes. En promedio, este es el tiempo
que dura la tramitación de un expediente en ese juzgado:
*Alimentos: 30 días.
* Tutela: 20 días.
* Cobro ejecutivo: 20 días
* Divorcio por presentación conjunta: 80 días.
*Divorcio convertido durante la primera audiencia en causal objetiva (art. 214
CC): 30 días
*Daños y perjuicios (sin demoras ocasionadas por la causa penal): 120 días
Una medida que usa este juzgado es tener en la mesa de entradas un teléfono
para que los letrados o partes puedan comunicarse con el juez o secretario y
evacuar sus dudas. Por otro lado se advierte en el juzgado una clara concepción
del trabajo en equipo. Hay una terminal de autoconsulta en la mesa de entradas,
para uso de los letrados. Hay que tener en cuenta que la oficina de notificaciones
de Pergamino, notifica en el día.
Caso 2: Tercera Cámara del Trabajo de Mendoza
Ahí existe un proceso eminentemente oral. Los jueces se encontraban con que
gran cantidad de audiencias de vistas de causa se suspendían porque faltaban
tramites previos, no se había notificado un testigo, faltaba un dictamen pericial,
etc.
Se tomaron las siguientes medidas:
*Solo se acepta la prorroga de audiencias de vista de causa una vez comenzadas
por una sola vez, para completar una testimonial faltante que alguna parte considera
fundamental, con el emplazamiento de finalizar la audiencia en la fecha no obstante
la incomparencia del testigo.
*Aplicando la legislación vigente, se sumarizaron los procesos de menor cuantía
(de menos de 2000 $) y los procesos con partes en rebeldía, comunicando el objetivo
a los letrados y evitando así fijar la audiencia oral.
Los resultados fueron muy favorables. En 1996 el tribunal dictó 295 sentencias.
En 1998, aplicando las medidas antes mencionadas, se dictaron 559.
también mejoraron considerablemente los resultados de las audiencias de conciliación:
De mas de 200 audiencias fracasadas, el numero bajó a 100.
Hay que destacar que en este caso tampoco hubo incremento alguno de personal
o presupuesto.
Esto no termina aquí
El lunes veremos otros casos de oficinas judiciales eficientes e ineficientes,
entre ellas, el caso de algunas iniciativas tomadas en el fuero comercial de
la Nación y en la tramitación de causas penales que involucran a NN.