El evento se llevará a cabo conforme al siguiente temario:
Primera jornada
- Conformación del comité de crisis.
- Tácticas y estrategias de la negociación.
Segunda jornada:
- Resolución táctica.
- Medidas a adoptar ante una situación de crisis con rehenes.
La actividad académica se organiza en el marco del acercamiento entre la policía y la justicia en un momento en que se percibe la necesidad de un acuerdo entre todos los participantes de la lucha contra el delito: Poder Judicial, Poder Legislativo y las fuerzas de seguridad. Justamente, el Senado tiene previsto tratar en los próximos días uno de los varios proyectos de ley que proponen agravar las penas para los casos de toma de rehenes. Si se aprueba esta reforma al Código Penal al incluir el «artículo 142 ter», este delito pasará a tener una condena de 10 a 25 años de prisión.
Además del agravamiento de la pena, otra modificación importante sería la de incluir en el texto del Código el concepto de rehén. El proyecto de ley define la toma de rehenes como la situación en que una persona es retenida en "garantía" para "obligar a un tercero a cumplir determinadas condiciones, con el fin de cometer un delito cualquiera, para ocultarlo, asegurar sus resultados, negociar la impunidad o una disminución en la pena, o el otorgamiento de privilegios, para sí o para otro, o para fugar o eludir de cualquier forma la acción de la Justicia".
Actualmente el Código Penal prevé situaciones semejantes a la toma de rehenes en los artículos 141, 142 y 142 bis. El primero se refiere a la "privación ilegal de la libertad personal de otro" y contempla una pena de 6 meses a 3 años de prisión. El segundo es la figura agravada, que se da cuando con la privación de la libertad personal cuando hay violencia y se castiga con 2 a 6 años de cárcel. El tercero establece penas de 5 a 15 años para el que retenga a una persona para obligarla a ella o a un tercero a hacer o no hacer algo contra su voluntad.
Un informe del Ministerio del Interior indica que por año, en la Argentina hay 730 tomas de rehenes. Esto significa un promedio de dos por día. Asimismo, 80 por ciento de los casos ocurre en la zona conformada por Capital Federal y Gran Buenos Aires.