En diálogo con Diariojudicial.com, Ruiz Moreno aseguró que era "una temeridad" el informe de Mugnolo, porque "cita como actuales datos de 1998 y 1999 y deja que lo positivo en lo que están trabajando muchas personas se pierda en una sola nota de prensa", y pidió que se destaque también los aspectos positivos, que se ocupó de remarcar.
El subsecretario de Asuntos Penitenciarios y mano derecha del ministro De la Rúa citó un extracto del Informe anual del Procurador, que se ocupa de bregar por los derechos humanos de quienes están detenidos en unidades carcelarias: "Se entiende que esta política se encuentra en proceso de implementación y augura un mejor futuro en este campo, particularmente, porque entre los principios figura el respeto por la dignidad humana".
"Resulta extraño -disparó Ruiz Moreno- que quien hace este señalamiento no ponga luego en contexto las denuncias que realiza, acontecidas con anterioridad al año mencionado. En efecto, una política de transparencia en el sector supone poner muchos engranajes en movimiento y eso es lo que estamos haciendo".
Sin embargo, tanto Ruiz Moreno como Mugnolo coincidieron en sendos reportajes concedidos a Diariojudicial.com que "las cárceles son depositos de personas" donde no se cumple con la prescripción constitucional, es decir, que las cárceles deben ser "sanas y limpias, para seguridad y no para castigo".
Ruiz Moreno destacó que se aumentó en un 34 por ciento la matricula del EGB (Educación General Básica) de los internos del que dependen del Servicio Penitenciario Federal y señaló que se está llevando adelante un proyecto de promoción de la salud, en el que colaboran otros organismos que dependen del Estado.
Respecto de las estadísticas que difundió Ciafardini, aseguró que "no es verdad que las cárceles federales estén superpobladas en un 40 por ciento", sino que el problema alcanza solo al 2 por ciento, con 7601 plazas disponibles en unidades en las que según advirtió Ruiz Moreno se alojan 7730 internos.
El funcionario reconoció que "mientras algunas unidades como la de Devoto, tiene una sobrepoblación del 26 por ciento, otras sólo tienen su capacidad ocupada parcialmente, como la Unidad 19 (instituto correccional abierto), con un 63 por ciento".
Ruiz Moreno insistió con su explicación de que las cárceles del Sistema Penitenciario Federal históricamente se construyeron en el sur, con la idea de que había que confinar más que recuperar a los internos, y que la mayoría de los delitos federales, como el contrabando y el narcotráfico se cometen en las provincias de frontera norteñas.
Finalmente el funcionario expresó que se construirán cuatro nuevas cárceles ubicadas en Marcos Paz, Mercedes, Coronda (Santa Fe) y Güemes (Salta), todas con capacidad para 2204 presos, y anunció que el establecimiento de nuevas Alcaidías Federales, en el norte y el litoral para atender al incremento de detenidos y procesados (es decir, todos sin condena), que superan cómodamente la mitad de los internos federales.
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