El tribunal holandés consideró que Tribunal Penal Internacional (TPI) de la ONU, creado por una resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas en mayo de 1993, tenía autoridad en el marco de las leyes holandesas e internacionales para detener y juzgar a Milosevic por crímenes contra la humanidad.
"La ley nacional e internacional reconoce, de acuerdo con el ordenamiento jurídico holandés, que el tribunal tiene la exclusiva autoridad para decidir la detención de sospechosos...por lo que éste no es un asunto holandés", dijo el juez de la corte del distrito, Roel Paris, en su resolución.
Ayer, la fiscal Carla Del Ponte informó que está preparando otras dos acusaciones contra Milosevic, entre las que figuran cargos de genocidio, por crímenes en Bosnia y Croacia.
La semana pasada, los abogados de Milosevic habían efectuado la presentación ante el tribunal holandés de primera instancia, cuestionando la jurisdicción del tribunal internacional en la ex Yugoslavia. Igualmente, denunciaron que el líder serbio de 60 años había sido "secuestrado" y dijeron que debería ser puesto en libertad de inmediato.
Ante esta decisión del tribunal holandés, los defensores de Milosevic expresaron que apelarían el fallo ante una corte holandesa de segunda instancia y advirtieron que, de ser necesario, acudirían a la Corte Europea de Derechos Humanos para lograr la libertad del ex presidente de Yugoslavia.
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