La muchacha, que se pasea por la capital chilena solo ataviada con anteojos oscuros y un par de botas, se hace llamar "baby vamp".
Por su parte, la madre de la muchacha, reiteró ante la juez que ella autorizó a su hija para caminar desnuda por Santiago. El padre de la joven es un ciudadano argentino que no vive en Chile.
Al juzgado llegó también el fotógrafo argentino Luizo Vega, inventor de la idea, que promueve como una acción artística.
Entretanto, en el gobierno están divididas las opiniones en torno a expulsar o no a Vega, dijo el periódico electrónico El Mostrador.cl.
Entre los que están por echarlo alegan que hay que considerar que además contra el argentino pesa una denuncia por abuso sexual de un niño de 12 años en un juzgado de La Serena, 400 kilómetros al norte de Santiago.
Los partidarios de permitirle que siga en Chile están los que creen que una expulsión podría ser considerada un abuso contra la libertad de expresión, cuestión alegada por un diputado oficialista y una actriz, que acudieron a defender a Vega al palacio de gobierno.
Los desnudos de la joven atrajeron a la prensa, que la persigue para saber cuándo y dónde volverá a pasearse sin ropas, mientras la opinión pública ha reaccionado con indiferencia.