No faltaron los que pontificaron que los jueces y los abogados estaban acostumbrados a “otra cosa”, que tenían una mentalidad poco afecta al cambio y que, en definitiva, no aceptarían a quienes, como nosotros, se proponían nada mas y nada menos que sumar rigor académico, precisión terminológoca y diversión periodística.
El tiempo nos dio la razón y cada vez más abogados, jueces, estudiantes de derecho, periodistas y todos aquellos interesados por la actividad tribunalicia y legislativa se fueron acercando, convirtiéndonos en un referente obligado a la hora de “saber lo que realmente pasa” en esos temas.
Doce mil quinientas cincuenta y una noticias publicadas, cientos de fallos "frescos" (recién salidos de los juzgados), pero sobre todo veinticuatro mil seiscientos cuarenta y tres suscriptores de todo el país (al tiempo en que se lea esto ya serán más) constituyen el mejor regalo que pudimos recibir para festejar nuestro tercer cumpleaños. A riesgo de perder una de nuestras características y resultar poco originales, solo podemos decirles: Gracias.