Tanto De la Rúa como Mestre habían sido indagados por este tema, pero la juez Servini le dictó la "falta de mérito", en una medida que luego avaló la Cámara Federal en su resolución del 26 de julio último. Sin embargo, para los fiscales ahora hay nuevas pruebas, que avalarían que las detenciones fueron "arbitrarías e ilegales".
Entre estas nuevas pruebas, los fiscales detallan una veintena de testimonios de personas que fueron detenidas cuando simplemente miraban lo que sucedía en la plaza o pasaban por el lugar, como Diego Zanoni, quien fue detenido cuando cruzaba la Plaza de Mayo rumbo a su trabajo.
En un escrito de 17 carillas, que Diariojudicial.com publica íntegro, los fiscales recuerdan que "en cumplimiento de la orden -ilegítima y arbitraria- del Jefe de la Policía Federal, personal policial de la Comisaría Segunda procedió a la detención indeterminada de personas, quienes fueron conducidas a la sede de dicha Seccional e ingresadas en los libros de la dependencia como a disposición del Poder Ejecutivo Nacional".
Luego indican que "de las veintinueve detenciones cuestionadas", se comprobó que "en veintidós casos que dichas privaciones de la libertad fueron ilegales y que no guardaban ninguna relación con los motivos que llevaron al dictado del estado de sitio el día 19 de diciembre de 2001", por el decreto 1678/01.
De esta forma, los fiscales entienden que esta probado el delito de abuso de autoridad, y la responsabilidad de De la Rúa y Mestre como "autores" y la de Loiácono como "partícipe", ya que, dicen los fiscales, avaló las detenciones confeccionando un decreto que "no siguió los pasos habituales", y dio por cierta sin más trámite la información policial.
Además, los fiscales sumaron un peldaño en su enfrentamiento con Servini y no se privaron de alertar sobre la "notable demora" en el avance de la investigación en torno a las responsabilidades políticas de la represión y recuerdan que esto "contrasta notablemente" con el ritmo que ellos le imprimieron a determinar las responsabilidades concretas de los policías en la muerte de manifestantes.