En diciembre, Simon Vallor, un diseñador de sitios web y disc jockey de 22 años, admitió haber violado la sección tercera de la Ley del Mal Uso de las Computadoras del Reino Unido, al reconocer haber sido el autor de los gusanos W32/Gokar, W32/Redesi y W32/Admirer que acusaron de distribuír por correo electrónico.En el juicio se ha considerado probado que los tres virus infectaron a unas 27.000 computadoras de 42 países, (a principios de 2002 Gokar llegó a ser el tercer virus más habitual en internet) aunque la fiscalía sostiene que la magnitud del daño fue mucho mayor al estimar quelas infecciones ascienden a 330.000 en 46 países.
En su sentencia, el juez Geoffrey Rivlin recalcó que los programadores de virus "no debieran ser considerados fanáticos de los ordenadores, sino criminales. Sus virus causan destrucción, trastornos, consternación y pérdidas económicas en gran escala". No obstante, en la sentencia señala que ha contemplado la juventud de Vallor, así como su predisposición y fundamentalmente que se haya declarado culpable. Los analistas opinaron que la sentencia del juez demuestra que la justicia británica considera a los cibercriminales de la misma manera que a los criminales tradicionales.
El creador de W32/Gokar fue detenido por la policía británica hace casi un año, el 14 de febrero de 2002, que utilizó informes de inteligencia proporcionados por el FBI También la unidad de Scotland Yard especializada en delitos informáticos ayudó a la policía de Gales del Norte en su investigación.
Simon Vallor se suma a Christopher Pile (Black Baron) y David L. Smith (autor del virus Melissa), quienes también fueron condenados prisión por sus delitos informáticos. La controversia inicial acerca del enjuiciamiento de Vallor se centraba en que reconocía haber creado los virus, pero decía no haber sido él quien distribuyó los gusanos por correo electrónico y, por lo tanto, causado las pérdidas económicas de las que se lo acusa.
Otro caso reciente de un “padre de virus” condenado, es el del holandés Jan de Wit, apodado OnTheFly, empleado de un negocio de computación, que confesó ser el autor del virus Kournikova, creado con una utilidad llamada VBS Worm Generator desarrollada por un argentino apodado Kalamar y cuya aparición hace un año causó gran alarma entre los usuarios de internet aunque el virus fuera demasiado dañino. Sin embargo el autor del Kournikovasólo fue sentenciado a 150 horas de servicio comunitario en el 2001
No todos los países parecen considerar a los creadores de virus tan peligrosos como a los criminales tradicionales. Pese a la diferencia de criterios existentes a la hora de considerar a un programador de virus como un criminal peligroso o no, y a la falta de legislación específica en muchos países, lo cierto es que en el Reino Unido y en los EEUU, los daños económicos que producen son motivo suficiente para considerar a jóvenes como Vallor casi tan peligrosos como el autor de cualquier otro delito doloso contra la propiedad, comparando la duración de la sentencia de estos crímenes con la que enfrentará este galés.