En cada uno de los casos rechazados, dijo Motz, las cortes estatales han determinado que el llamado comprador indirecto no puede ser compensado por daños.
Ocurre que la mayoría de los consumidores compra el sistema operativo Windows de Microsoft y otro software de la empresa en tiendas minoristas, o los adquieren pre-instalados en las computadoras que compran.
Los casos son parte de una serie de demandas colectivas introducidas contra Microsoft en nombre de consumidores tras el histórico caso antimonopolio presentado por el gobierno contra la empresa.
El juez revisa varias de las demandas de los consumidores, así como casos civiles presentados por las firmas Sun Microsystems Inc., Netscape Communications -una unidad de AOL Time Warner Inc. -, Be Incorporated y Burst.com.
En estos casos de demanda colectiva, los accionantes alegan que Microsoft abusó de su poder monopolista para impedir la competencia en el mercado de sistemas operativos para computadoras personales, que influenció con su monopolio de Windows para obtener una posición dominante en los mercados de procesadores de palabras y utilizó su posición monopolista en esos mercados para recargar precios a compradores de software Windows, Word, Excel y Office.
Cabe recordar que ya la corte de apelaciones para el Distrito de Columbia analizó en el 2001 la demanda del gobierno federal y acordó en que Microsoft ilegalmente había mantenido su monopolio del sistema operativo Windows para computadoras, pero rechazó escindir la compañía en dos unidades para evitar futuras violaciones.
Un arreglo en torno a la demanda del gobierno fue respaldado por la juez de distrito Colleen Kollar-Kotelly en noviembre, aunque Massachusetts y West Virginia apelaron ese acuerdo.