En uno de los puntos que más puede interesar al público en general, los expertos han opinado que el hecho de descargar música desde Internet no debería considerarse delito, si no tiene por fin una actividad comercial.
Se pretende que el nivel de las sanciones sea "disuasorio" cuando se compruebe la intención y el objetivo comercial de los delitos de piratería y falsificación ya que, según se expresó, "va dirigida contra los grandes infractores que piratean o falsifican con objetivos comerciales o que causan daños importantes a los detentores de los derechos de propiedad intelectual".
Esta directiva comunitaria está orientada a reforzar y asegurar el respeto de los derechos de la propiedad intelectual en la Unión Europea, tan hostigados por este nuevo fenómeno que se da masivamente en todo el mundo, a raíz de la vastedad de Internet y la facilidad de uso de dispositivos de copia y replicación. Al respecto la Comisión estima sobre el volumen de falsificación, que el 36 por ciento de las ventas a nivel mundial son productos pirateados.
En ese sentido, Jonathan Todd el portavoz de Mercado Interior en el Ejecutivo comunitario, afirmó que esta medida aprobada “no permite entrar en las sanciones penales por dos cuestiones: el Derecho penal de los Quince no está cubierto por el comunitario” .