El letrado se presentó esta mañana ante la Cámara Federal, solicitando que se investiguen las amenazas “su origen y contenido” y “se practiquen diligencias para individualizar a sus autores, instigadores, cómplices y encubridores”.
Según Piragini, la investigación de la amenaza que recibió el presidente “de ninguna manera puede depender de la voluntariedad ya que está en juego no solamente el ser humano que reviste la calidad de Primer Mandatario, sino la seguridad de las instituciones.”
Ahora, el fiscal Jorge Di Lello, de turno con el Juzgado Federal 1, deberá decidir si requiere la apertura de la investigación según los procedimientos habituales.
Así, tal vez esta denuncia tenga mejor suerte que otras presentadas por Piragini que no pasaron el examen fiscal. La más recordada entre periodistas acreditados es una donde denunció a la corona española por el genocidio indígena posterior a la colonización.
Durante el fin de semana, el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, precisó que el presidente Kirchner recibió intimidaciones en sus teléfonos celulares, donde le habrían descripto los movimientos de sus familiares.
Fernández dijo en varias radios porteñas que “cuando uno quiere avanzar tiene que soportar incriminaciones de todo tipo; las soporta el Presidente y las soportamos muchos de nosotros", aseguró.
Después, se confirmó que el gobierno no realizaría la denuncia judicial porque de esa forma “sólo favorecen las intenciones de los amenazadores”, según indicaron fuentes del Ejecutivo.