Morín había llegado a la Oficina Anticorrupción (ahora a cargo de Abel Fleitas Ortiz de Rosas) de la mano del ex ministro de Justicia Gustavo Béliz, y a partir de la conflictiva salida del Gobierno de su mentor comenzó a tener roces con la Rosada.
El conflicto al que hizo referencia el senador jujeño es de larga data. Morín había integrado la terna para la sala I de la Cámara Federal junto a Eduardo Freiler, pero había quedado en el cuarto lugar en el orden de preferencias. También participó en el concurso previsto para la cobertura de seis vacantes en los tribunales orales en lo criminal de la Capital Federal. Luego Morín renunció a la terna para el Tribunal Oral con la ilusión, y la promesa dicen algunos, de ir a los tribunales de Retiro.
Sin embargo, el presidente Kirchner ratificó a Freiler para la Cámara Federal, dejando afuera al titular de la OA. Por ese motivo, el pliego de Morín, para el Tribunal Oral, fue reenviado al Senado. El problema, según algunos senadores, era que la terna ya no la compartía con otros dos candidatos: uno de los jueces había sido designado, en el ínterin, para otro cargo.
Algunos senadores propusieron entonces que se devuelva el pliego al Poder Ejecutivo, para que éste le requiera al Consejo de la Magistratura que complete la terna. Sin embargo en la sesión del 3 de febrero el Senado aprobó el pliego de Morín.
Además, mediante el decreto 81/2005 se nombró a Elsa Matilde Diaz de Vivar, que integrará la Sala M de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil. El decreto fue publicado también este martes en el Boletín Oficial.
El pliego de la juez había ingresado al Senado en octubre de 2004 junto a otros ocho pliegos más. Luego superó , sin inconvenientes, la audiencia pública el 23 de noviembre.