La decisión fue tomada por el ministro del Interior, Straw a pedido del gobierno chileno que pretende obtener un salvoconducto médico para que el ex presidente de facto y actual senador vitalicio regrese a Chile. Sin embargo, la administración centroizquierdista que encabeza Eduardo Frei no logró ese objetivo antes de las fiestas navideñas. Tanto la Navidad como el Año Nuevo fueron pasadas por Pinochet en su encierro londinense junto a familiares.
Pinochet ha luchado durante los últimos 14 meses en los tribunales londinense para evitar su extradición a España. Se encuentra detenido en Londres el 16 de octubre de 1998 a raíz de un auto del juez español Baltasar Garzón por delitos de violación de los derechos humanos durante la dictadura chilena.
Pero el 8 de octubre pasado, el juez Ronald Bartle, del tribunal de Bow Street de Londres, dictaminó que podía ser extraditado a España por 34 delitos de tortura y uno de conspiración para la tortura.
Los abogados de Pinochet preparan ahora una apelación contra el veredicto de Bartle que deberán presentar en una vista judicial que comenzará en el Tribunal Superior de Londres el 20 de marzo próximo. El reconocimiento médico de mañana responde a la petición del Gobierno de Santiago al Ejecutivo británico para que ponga en libertad a Pinochet por razones humanitarias, alegando su avanzada edad y estado de salud. Con los resultados de los exámenes en la mano, Straw, podrá decidir si sigue adelante el proceso de extradición o si, por el contrario, el general retirado puede regresar a su país. Pero Pinochet no parece tener muchas esperanzas en que los exámenes médicos le sirvan para regresar a Chile y evitarle un largo proceso de apelaciones y, en última instancia, su extradición a España. El general parece tener más esperanzas en que una eventual victoria electoral del candidato de la derecha en Chile y su ex colaborador, Joaquín Lavín, le saque de la pesadilla judicial en que se encuentra desde hace 14 meses. La detención de Pinochet se ha convertido en tema de campaña de la caliente lucha electoral entre el candidato oficialista Ricardo Lagos y Lavín que agrupa a la centroderecha. Lagos apenas aventajó a Lavín por 34.000 votos en la primera vuelta y la solución del caso Pinochet es un tema de alta política para el gobierno de Frei, curiosamente embretado por un juez que estuvo en el socialismo español.
Durante los exámenes médicos estarán presentes dos observadores designados por Pinochet: uno de ellos es un facultativo del Ejército chileno y otro es el médico de cabecera que le asigna el Sistema de la Seguridad Social en la zona cercana a Londres donde reside. El propósito del Gobierno británico es "ver si Pinochet está básicamente bien de salud" para continuar el proceso judicial porque "si se muere en Londres, sería un problema", manifestó la mencionada fuente, que indicó que no ha habido un deterioro visible en la salud del ex general en los últimos meses.
Según los médicos que le atienden, Pinochet padece hasta doce enfermedades, entre esas diabetes y artrosis; lleva un marcapasos y en septiembre pasado sufrió dos pequeños derrames cerebrales. Pinochet pasó su segunda Navidad y entró en el año 2000 bajo arresto domiciliario en la casa que tiene alquilada en la urbanización de lujo de Wentworth Estate, cerca de Londres, donde estuvo acompañado durante las fiestas por su esposa Lucía, su hija Verónica, su hijo Marco Antonio y varios de sus nietos.