“Diagramando entre todos las bases constitucionales de América Latina y el Caribe” fue el título del Congreso organizado por el EFT, una asociación civil sin fines de lucro que trabaja sobre la problemática del trabajo desde la perspectiva del derecho, y el Instituto Federal de Estudios Parlamentarios. En esas jornadas jueces, abogados argentinos e invitados españoles debatieron el proyecto que significó el primer paso para que América Latina tenga su Constitución.
El proyecto de Constitución Latinoamericana fue aprobado durante el V Foro Mundial Social que se realizó en enero en Porto Alegre, a propuesta de Capón Filas. Tiene 231 artículos y esta dividido en 3 libros – Sociedad y Derecho, Sociedad y Estado y Responsabilidad del Estado- compuestos por capítulos. El texto completo se puede ver en www.eft.org.ar
“Se trata de que haya una norma general que salve los derechos fundamentales de las personas. La única forma de salir de un estado de crisis económica esta en la unidad. Entre todos los países se puede conseguir la posibilidad de una estructura económica mucho mejor conseguida a través de una moneda común, de instituciones que sirvan para paliar los excesos en la jurisdicción como son los tribunales supranacionales” le contó a Diario Judicial.com el espíritu de este proyecto el español Francisco Javier San Martín Rodríguez, presidente del Consejo General de Graduados Sociales de España, uno de los invitados a la presentación de las bases constitucionales.
La presentación de las bases constitucionales se realizó en el salón Arturo Humberto Illia de la cámara alta y estuvo a cargo de Rubén Camel Layún, vicepresidente del EFT, y los españoles Manuel Zaguirre, de la Unión Sindical Obrera española, y San Martín Rodríguez a los que luego se sumo Daniel Scioli, presidente del Senado.
Allí Scioli se refirió a la Constitución Latinoamericana como uno los “avances de la región que permiten hacer un salto cualitativo y llegar a la integración”.
Antes, Zaguirre había descrito una ventaja de Latinoamérica para fundar su Constitución. Dijo: “el todavía no alcanzado desarrollo económico y financiero de la región es una ventaja, ya que se puede pensar la Constitución sin las internas económicas que tiene Europa donde la Constitución está trabada por estos temas”.
Los países miembros de la comunidad europea lograron una integración regional profunda, comparten una misma moneda, tienen un parlamento europeo aunque el proyecto de Constitución parece contar con resistencias en algunos países como Holanda y Francia donde sus ciudadanos, en elecciones, no ratificaron el texto constitucional.
Para profundizar las alcances de la Constitución Latinoamericana, durante las dos jornadas se desarrollaron tres paneles. Allí se debatieron la cuestión social, económica, los principios del derecho constitucional, los derechos humanos y la representación ciudadana que tienen alcance en las bases. Al cierre de esta edición las comisiones de trabajo, que durante la tarde viernes se conformaron para discutir determinados temas, le estaban presentando sus conclusiones al plenario.
La presentación de las bases constitucionales para América Latina y el Caribe es apenas el primer bosquejo de un texto que será analizado y, seguramente, reformulado por cada uno de los diversos actores sociales, instituciones y gobiernos de todo el continente. Pero se ya se dio el primer para que la región tenga una ley suprema.