También a primera hora se hizo presente en los Tribunales de la avenida Comodoro Py 2002 Estela Carlotto, presidenta de las Abuelas de Plaza de Mayo, quien concurrió para "ponerse a disposición" de Servini de Cubría y ofrecerle "todos los elementos" que la entidad que preside dispone, "para colaborar en esta causa". Carlotto se mostró "contenta, expectante y con muchas inquietudes" por el avance de esta investigación que permitiría que doce niños "recuperen su verdadera identidad".
La dirigente de Derechos Humanos dijo que "esta causa no interfiere en nada" con la que lleva adelante el juez federal Adolfo Bagnasco, ya que "acá se trata de niños que estamos buscando las Abuelas, con circunstancias puntuales de los apropiadores que intervinieron". Bagnasco está investigando "un plan sistemático" que se habría implementado durante la lucha antisubversiva, para apoderarse de los niños nacidos cuando sus padres estaban en cautiverio.
Por su parte, Servini de Cubría confirmó que en los últimos días se logró la detención de seis suboficiales retirados de la Armada, mientras que un séptimo, llamado Pedro Muñoz, "está prófugo", y faltaría detener a una octava persona. En declaraciones a radio Continental, Servini de Cubría dijo que se estima que "unos diez o doce niños" habrían sido entregados a apropiadores. Sin embargo, la magistrada no quiso dar demasiados detalles sobre el tema porque --aclaró-- la causa "está en la Cámara", a raíz de que ella fue recusada, y "entonces este expediente está demasiado demorado por varias cosas".
Los detenidos son seis: Amadeo Romero, Mario González, Alberto Astí, Domingo López, Alfredo Vera y Jorge Oliva. Existen dos prófugos, uno de ellos de nombre Pedro Muñoz, quien en su momento cobro triste notoriedad al pedir dinero para hablar sobre estos secuestros ilegales. La investigación comenzó a partir de datos que acercó Alcira Ríos, la abogada de las Abuelas de Plaza de Mayo. A partir de allí se produjo la detención de Policarpo Vázquez, un suboficial de la marina que se encuentra acusado de haber secuestrado a la hija del matrimonio de desaparecidos formado por Guillermo Bauer y Susana Pecoraro.
Sin embargo, la posible hija de ese matrimonio Evelyn Karina Vázquez Ferrá se negó a realizarse el ADN correspondiente para determinar su verdadera filiación biológica. Como la joven es mayor de edad, solo puede realizarse los estudios en forma voluntaria, lo que complica la investigación judicial. Pese a eso Servini mantiene preso a Vázquez porque considera que tiene pruebas suficientes para imputarle el delito de apropiación ilegal de menores nacidos en cautiverio durante el Proceso Militar que no prescribe ya que es de acción permanente. Esa misma figura procesal podría caberle a los actuales detenidos.
Consultada la jueza sobre la sistematicidad de estas apropiaciones en el período de la dictadura militar (1976-1983) dijo que "eso no lo puedo afirmar porque sería demasiado prematuro". Argumentó además que "aún no hemos podido indagar a nadie y tenemos que tener bien, con exactitud, las fechas de todos para ver qué es lo que surge de todo esto". También reconoció que hay testimonios de gente que vive en ese barrio -el edificio Las Toninas de la ciudad balnearia- que han dado declaración de que eso era algo que se conocía en el lugar. La jueza calificó de "muy positivos" los allanamientos realizados el jueves en las dependencias de la Marina de Guerra.
La jueza no albergó demasiadas esperanzas de que los detenidos hablen durante las indagatorias: "es muy difícil, son muy reacios generalmente", se resignó. Luego destacó el trabajo de la Gendarmería "que ha hecho un trabajo de investigación en forma muy prolija para detectarlos porque dentro del complejo habitacional de Las Toninas se cambiaban de edificios y de departamentos, por lo que las direcciones que teníamos no siempre eran las exactas".
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