Un fiscal pidió que el periodista del diario El Mundo Fernando García sea condeno a un año de prisión y a pagar una indemnización de 150 mil euros al jefe de la Guardia Urbana de Barcelona, Xavier Vilaró, y otros 30 mil al ayuntamiento de esa ciudad.
El periodista escribió una nota en la que sostuvo que Vilaró mintió respecto a cómo fueron los hechos en los que fue agredido con una “pelota de goma lanzada por los Mossos d´Esquadra”, informó el diario español El País, en la madrugada del 30 de junio de 2008 en la plaza Espanta.
La fiscalía consideró que García fue “plenamente consciente del perjuicio que esas informaciones han causado en la actuación profesional y la honorabilidad personal” del Jefe de Guardia Urbana, ya que lo acusó “un delito de falsedad y llamarle mentiroso” sin “comprobar como hechos verdaderos” lo que eran “simples insinuaciones”.
El jefe policial tuvo que ser operado y se le extirpó el vaso y la denuncia penal que realizó fue archivada luego que la Justicia no pudo identificar al agresor.
En la causa, la fiscalía también pidió que otro periodista, del Vicent Partal, del portal de noticias Vilaweb, paga 50 euros diarios durante 10 meses por el delito de injurias.
Las calumnias e injurias son rechazadas por la comunidad periodística al considerar que limitan la libertad de expresión y la posibilidad de criticar, sobre todo, a los funcionarios públicos durante su gestión.
El Senado argentino convirtió la semana pasada en ley la derogación de las penas de prisión para las calumnias e injurias pero mantuvo multas económicas para quienes cometen esos delitos.
Sin embargo, en la nueva norma, que reformó el Código penal, se fijó que no habrá sanciones cuando “las expresiones referidas a asuntos de interés público o las que no sean asertivas”. “Tampoco configurarán delito de injurias los calificativos lesivos al honor cuando guardasen relación con un asunto de interés público”, completó la reforma.