Lo dijo en el último día del Jury en su contra. El próximo 25 de marzo se dará a conocer la sentencia. Los consejeros Luis Cabral y Ernesto Sanz pidieron la remoción del magistrado, actualmente suspendido, por sus “resoluciones absurdas, arbitrarias, la caótica situación de su tribunal y [el] desconocimiento del derecho vigente”. El abogado Marcelo Brito repitió que su defendido “tocó intereses importantísimos” cuando citó a declaración indagatoria a Francisco De Narváez.
El próximo 25 de marzo a las 13 el Jurado de Enjuiciamiento dará a conocer la sentencia en el juicio político que se le sigue al suspendido juez federal de Zárate-Campana Federico Faggionatto Márquez desde el martes 23 de febrero.
Así lo manifestó el presidente del jury Juan Facundo Giudice Bravo, después de conceder a Faggionato este viernes la posibilidad de que dijera sus “últimas palabras”.
“Soy completa, total y absolutamente inocente” dijo el magistrado luego de que la acusación, encabezada por los consejeros de la Magistratura Luis Cabral y Ernesto Sanz, pidiera su remoción y la defensa, a cargo del abogado Marcelo Brito, solicitara el rechazo de los cargos y la restitución del juez.
Sanz y Cabral, en su calidad de “fiscales”, pidieron la destitución de Faggionatto por las “resoluciones absurdas, arbitrarias, la caótica situación de su tribunal y desconocimiento del derecho vigente” del magistrado.
Cabral retomó los dichos del ex ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires León Arslanian (que testificó ante el jury) y recordó que el ex funcionario se refirió a la responsabilidad de Faggionatto en “procesos ‘amañados’ contra policías decentes en ese ámbito de corrupción” que era Zárate-Campana.
El presidente del Consejo de la Magistratura también se refirió a la causa que se le inició a Faggionatto por la presunta venta ilegítima de una producción de soja, a las “detenciones ilegítimas por parte de la policía que actuaba sin ningún tipo de control” y a la presunta connivencia del suspendido juez con “un foco de corrupción policial”.
También aludió a la demora en las causas que tramitaban ante ese juzgado federal y manifestó que cuando esas dilaciones llegan a los dos o tres años reflejan “la caótica situación del Tribunal”.
Sanz por su parte tuvo definiciones más políticas –al igual que en el primer día del juicio contra Faggionatto- y dijo que estos procesos “son juicios políticos, de responsabilidad, y no procesos penales, que los juzgarán los jueces de instrucción”.
El presidente de la Unión Cívica Radical afirmó que “no se están juzgando errores humanos aislados sino un patrón de conducta” y enfatizó que Faggionatto Márquez afronta otras denuncias en el Consejo de la Magistratura.
“Hay sobradas razones de hecho y de derecho para solicitar la destitución (del suspendido magistrado) en garantía y resguardo del bien público” dijo Sanz quien insistió en las “razones serias y fundadas” que, a su entender, posee el jurado para remover a Faggionatto Márquez.
En tanto, el abogado Brito atribuyó las denuncias a su defendido a una “interna judicial”, de Faggionatto con el Defensor Oficial Alberto Carrara y los fiscales de su distrito.
Brito opinó que el suspendido juez “tocó intereses importantísimos” cuando citó a prestar declaración indagatoria al diputado Francisco de Narváez en la causa por “la ruta de la efedrina” pocos días antes de las elecciones parlamentarias de junio del año pasado.
El abogado cordobés también advirtió al Jurado de Enjuiciamiento de tener “cuidado con construir monstruos que terminen devorándolos”.
Para destituir a un juez son necesarios cinco votos del Jurado de Enjuiciamiento, que en esta oportunidad está integrado por el camarista Juan Facundo Giúdice Bravo (presidente), los senadores Mariana Riofrío y Juan Marino, los diputados Juan Irrazabal y Rubén Lanceta, el juez de cámara Jorge Villada y el abogado Daniel Medah. Otros jueces con problemas El Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados bonaerense decidió este jueves juzgar a los jueces Rafael Sal Lari (de Garantías - San Isidro) y Esteban Rossignoli, del mismo distrito. Ambos están acusados de “mal desempeño” de sus funciones.