La comisión de Planeamiento Urbano de la Legislatura de la Ciudad elaboró un dictamen a favor del impulso de las denominadas “terrazas verdes”. Se trata de una iniciativa que prevé el establecimiento de vegetación en los techos de los edificios para fomentar la preservación del medio ambiente.
La comisión de Planeamiento Urbano de la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires, presidida por Silvina Pedreira, aprobó un dictamen sobre un proyecto que impulsa las denominadas “terrazas verdes”. Se trata de una iniciativa que prevé el establecimiento de vegetación en los techos de los edificios en pos de fomentar la preservación del medio ambiente.
La iniciativa, es impulsada por Gerardo Ingaramo (Pro) quien explicó que “una ciudad como Buenos Aires necesita de mecanismo alternativos que permitan disminuir las inundaciones por medio de la ampliación de la superficie de absorción de lluvias”. Ahora deberá ser tratado por la Legislatura en pleno.
En cuanto a los detalles del proyecto, este incorpora los artículos 5.10.4.1 y 5.10.4.2 al Código de Edificación especificando los detalles técnicos para la implementación de los techos verdes, tales como el material a utilizar para la cubierta así como la impermeabilización de los sumideros.
Asimismo, entre sus fundamentos el proyecto destaca que “en el mundo se ha desarrollado el concepto de ‘Terrazas’ o ‘Techos Verde’ para las grandes urbes” y que “ya ha producido resultado alentadores”. Se da cuenta de cifras tales como que en Alemania se han ganado, 15 millones de m2 verdes, destacándose la ciudad de Berlín, en el Reino Unido 300.000 m2 al año, en Estados Unidos 233.000 m2 en el 2005. Además, en Tokio existe una ley que obliga a la implementación de la técnica desde el año 2001.
“Las acciones humanas han contribuido al calentamiento global durante los pasados 50 años y, si continuamos así, aumentará la velocidad y la magnitud del mismo”, consigna el texto del proyecto. Y agrega: “podemos distinguir dos tipos de acciones. La primera y más urgente, es que evitemos que el problema empeore, a través de varios tipos de mitigación; y la segunda, es facilitar a las comunidades la adaptación a los cambios, que ya son inevitables”.
Tal es así que, “cubrir con especies vegetales los tejados se enmarca plenamente en el proceso de ‘desarrollo sostenible’, ya que permite reducir la impermeabilización de los suelos, así como mejorar la calidad del aire y del agua, fijar el CO2, limitar los flujos y las inundaciones y también hacer que las ciudades sean mas armoniosas”, explica.
Los techos verdes requieren de un tipo de construcción que haga hincapié en el aislamiento e incluya una estructura reforzada. “A fin de evitar filtraciones éste tipo de construcciones ecológicas necesitan estar tipificadas en el Código de Edificación de la Ciudad”, argumentó el legislador.
“100 metros cuadrados de follaje pueden absorber entre 10 y 30 miligramos de polvo por día. Por otra parte absorben los ruidos y limitan considerablemente la reflexión de los materiales, reduciendo el efecto “isla caliente” de las ciudades y el efecto invernadero”, sentencia entre sus fundamentos la iniciativa.