Las asociaciones que nuclean a empleados y funcionarios judiciales de Entre Ríos anunciaron que participarán de la Reforma Penal que lleva a cabo la provincia, en la que se prevé la implementación de la Cámara de Casación Penal.
Desde hace más de un año, en Entre Ríos comenzó una discusión que, finalmente, terminó con un proyecto que está empezando a concretarse: una Reforma Penal que incluye la creación de una Cámara de Casación en esa provincia. A pesar de los aportes realizados por diferentes personas del mundo del Derecho, para poder llevar adelante una iniciativa consensuada faltaba la colaboración de dos grupos importantes.
Se trata de funcionarios y empleados judiciales, representados a través de las organizaciones que los agrupan, quienes participarán de la Reforma del Código Procesal Penal y de la implementación de la instancia de la Cámara, una deuda del Poder Judicial entrerriano.
Fernando Cañete, titular de la Asociación de Judiciales de Entre Ríos (AJER), aseguró a medios locales que trabajarán en la Reforma en orden a que “habrá creación de cargos que deben ser cubiertos por personas que se encuentren en la lista de orden de mérito”. Al mismo tiempo destacó que la labor será llevada a cabo en conjunto con todas las jurisdicciones provinciales.
En este sentido, también declaró: “Le pedimos colaboración a todas las jurisdicciones que tienen que ver con los departamentos, porque con la reforma, hay creación de cargos que deben ser cubiertos por personas que se encuentren en lista de orden de mérito”.
Remarcó al mismo tiempo que esta iniciativa garantiza una carrera judicial a los empleados entrerrianos, por eso están tratando de llevar a cabo todas las acciones posibles para que antes de que la Reforma entre en vigencia los cambios puedan realizarse sin problemas y en orden.
Por otro lado, Alberto Sero, representante de la Asociación de Magistrados y Funcionarios del Poder Judicial de la Provincia de Entre Ríos (MagistraEr), consignó, en relación a la creación de la Cámara de Casación Penal, que “trabajaremos en ese tema para poder implementarla y ponerla en funcionamiento, lo que le dará dinamismo a la actividad”.
En este sentido, Sero agregó que “la Cámara de Casación es aparte del Código Procesal, pero ambos traen un dinamismo en la resolución de los procesos penales, ya que actualmente, se producen cuellos de botella”.
También precisó que “todas las causas van a terminar en Casación y con las Cámaras el proceso se dinamizará; ya tenemos una celeridad con el Código en las causas penales”.